En concreto, Bruselas ha impuesto una multa de 66.894.000 euros a Telefónica y otra de 12.146.000 euros a Pharol por este acuerdo, reafirmando así su decisión tomada en 2013.
En enero de ese año, la Comisión Europea anunció multas a ambas compañías por acordar no competir entre sí en los mercados de telecomunicaciones ibéricos: Telefónica no entraría en Portugal siempre que Portugal Telecom no lo hiciese en España, de modo que ambas partes se aseguraban un rival menos.
En junio de 2016, el Tribunal General de la Unión Europea confirmaba de manera íntegra las conclusiones de la comisión sobre la infracción de las normas de competencia, pero anulaba las multas impuestas al considerar que la Comisión debería haber examinado las alegaciones de las partes de que no existía competencia potencial entre ellas en determinados mercados y de que estos deberían haber sido excluidos del valor de las ventas sobre cuya base se calcularon las multas. Esta sentencia se confirmó en diciembre de 2017 por el Tribunal de Justicia.
Bruselas reactiva la multa con la misma cuantía que en 2013
Ahora, la Comisión Europea reactiva esta multa teniendo en cuenta la sentencia del Tribunal General y excluye, ahora sí, los servicios del valor de las ventas para las que se constató la existencia de barreras insuperables a la entrada y para las que las partes no estaban en competencia potencial entre sí durante el periodo de aplicación de la clausula de no competencia. Por ello, esta nueva decisión recupera las multas por el acuerdo de no competencia.
Según explican desde Bruselas, las nuevas multas impuestas se basan en los mismos parámetros de gravedad, duración y circunstancias agravantes y atenuantes que los de la decisión de 2013, motivo por el que mantienen las mismas cuantías que en aquel año.
Desde Telefónica señalan que están analizando la situación y evaluarán las posibles acciones que puedan llevar a cabo para resolver esta situación.
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