La teleco francesa contaba con una filial en Silicon Valley destinada a la innovación y formada por “expertos apasionados y con visión de futuro que prosperan conectando ecosistemas y haciendo que la innovación y la tecnología sean visibles, accesibles y procesables para un mundo digital responsable".
Sin embargo, tras 20 años de operación, Orange continúa con su proceso de reestructuración en todos los niveles como parte de su plan de ahorro estratégico ‘Lead the future’ y ha decidido clausurar este espacio, aunque se mantendrá la filial de Orange Business en Atlanta y la sucursal del grupo en Nueva York, una decisión que Sébastien Crozier, presidente CFE-CGC de Orange, ha considerado “extremadamente brutal”, por la sorpresa de la medida.
Portavoces del Grupo Orange confirman que la decisión se debe a la revisión estratégica y que la teleco está optando por “un enfoque más estricto en nuestro telecomunicaciones o actividades B2B en los mercados donde estamos presentes”, aunque reconocen “el valor y la contribución de los equipos al desarrollo de la empresa”.
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Innovación sí, pero no con Silicon Valley
Que Orange tuviese abierta una sede de innovación a 10.000 kilómetros de su sede central no era una mera casualidad, sino que responde al pulso tecnológico e innovador que se vive en Silicon Valley y que durante años ha servido para que la firma francesa pueda atraer innovación de primera mano, para lo que se cerraron alianzas con numerosas startups de la zona. Sin embargo, la telco francesa ya no parece tener interés en esta conexión con la meca tecnológica de Estados Unidos.
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