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jueves 07 de abril de 2016, 17:58h

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Apenas llevan un mes a la venta los nuevos Galaxy S7 y S7 Edge, y en ese tiempo Samsung ha conseguido vender más de 10 millones de unidades, ventas similares a los S6 durante el año pasado, pero inferiores a los S5 que superaron los once millones de unidades vendidas en el primer cuatrimeste.

Estas ventas superan las expectativas de la compañía surcoreana que sabe que en mercados tan importantes como Reino Unido, Francia y Alemania la presencia del sistema operativo Android ha caído entre 5 y 7 puntos en 2015. Aún así, la alta calidad de componentes de los nuevos S7 junto a su innovadora experiencia de realidad virtual con las Samsung Gear ha logrado mantener ventas.

Samsung Electronics ha logrado entre enero y marzo un beneficio operativo de 5.019 millones de euros, lo que supone un avance interanual del 10.37%, ha informado la empresa. En ingresos por ventas mundiales, Samsung ha facturado unos ingresos por ventas en todo el mundo por valor de 32.310 millones de euros, dato que supone un avance en términos interanuales del 3.99%.

Los semiconductores dan mejores resultados que los móviles

El año pasado la rama de semiconductores dio mejor rendimiento comercial que la de telefonía. Su división de chips fue la primera fuente de ingresos con un beneficio operativo de 9.645 millones de euros en, por encima de los 7.670 millones de euros de la rama de telefonía.

A finales de mes Samsung da los resultados de cuentas definitivos, veremos entonces como anda realmente la compañía asiática en el primer trimestre del año.

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