Wiko, el fabricante francés de dispositivos móviles, ha sabido hacerse con el mercado español, hasta el punto de convertirse en la cuarta marca más vendida de nuestro país.
Su cuota ha llegado al 8.5%, según datos de GFK, aunque según el mismo informe la empresa se sitúa en el tercer puesto cuando se habla de teléfonos entre 100 y 150 euros, con una cuota del 14%.
Entre enero y agosto la empresa vendió 300.000 unidades en nuestro país y esperan duplicar esta cifra cuando acabe 2016. Wiko fue fundada en Marsella, Francia, en 2011. Su estrategia de ventas se basa en la comercialización de teléfonos de calidad a un precio asequible y que además están disponibles en las tiendas de mayor renombre de nuestro país.
En Francia y Portugal Wiko tiene el segundo puesto, mientras que acaricia el cuarto en Italia y el quinto en Bélgica.
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