Y es que da igual todo lo que el nuevo director de Red.es, Jesús Herrero Poza, tuviera que contar o la labor que ha realizado el equipo desde noviembre de 2023, fecha de su nombramiento; da igual el curriculum que lo avala o su patente capacidad para el cargo que desempeña; en aquella sala del edificio de Caballerizas de la Universidad Menéndez Pelayo de Santander, mientras la lluvia estrenaba el mes de septiembre, todos los periodistas asistentes a la 38ª edición del Encuentro de la Economía Digital y las Telecomunicaciones, buscábamos un titular que permitiera nombrar a la mujer del presidente del Gobierno y la supuesta implicación de Red.es en ‘su trama’. Y así fue.
Pero, durante un rato, nos sentamos frente a Herrero, escuchamos su discurso, anotamos su mensaje, observamos a un inquieto y entusiasta directivo y consideramos que merecía la pena escucharlo con atención y transmitir aquello que nos quiso contar.
Difícil, arduo, sorpresivo e ilusionante
Zonamovilidad - Lleva usted casi un año como director de Red.es. ¿Cómo ha sido este tiempo? ¿Lo ha vivido como un trabajo difícil, arduo, sorpresivo o ilusionante?
Jesús Herrero: Pues creo que ha mencionado varias de las emociones que se experimentan cuando te toca liderar una entidad como esta. No es sencillo, sobre todo porque la gente espera mucho de Red.es y eso eleva el nivel de exigencia. Siempre digo que cuando un nuevo director general llega, lo principal es estar a la altura de la entidad. No hay que reinventar nada, pero sí dedicarle mucho esfuerzo, hablar con mucha gente y estar pendiente de los proyectos que se tienen en marcha, que, en nuestro caso, no son pocos. Estamos manejando miles de millones de euros y llegando a distintos perfiles sociales, lo que implica una responsabilidad enorme.
Zm - Usted tiene una amplia trayectoria tecnológica, incluida la de Director de Gabinete de la Secretaría de Estado de Digitalización. ¿Qué ha aportado de su experiencia previa a este nuevo reto?
JH: Lo que aporto, y se lo digo siempre a mi equipo, es tiempo y dedicación. No creo tener una inteligencia extraordinaria ni ser el mayor experto en todo, pero me involucro al cien por cien. Leo todos los informes, me mantengo al día con lo que me proponen los directores y procuro estar siempre informado. Y claro, cuando te comprometes a fondo con un proyecto profesional de esta magnitud, es inevitable que la parte familiar y personal se resientan un poco; pero creo que todo lo que estamos haciendo merece la pena.
Zm - ¿Cómo ha sido, hasta ahora, la experiencia personal de dirigir Red.es?
JH: Ha sido agotador, no lo voy a negar. Hay momentos en los que te sientes cansado e incluso dolido, porque a veces no se valora lo suficiente el trabajo que hacen más de 200 profesionales que se están dejando la piel. Sin embargo, procuro no perder el entusiasmo y ser feliz. Al fin y al cabo, sabes que lo que estás haciendo realmente está transformando el país, y esa es la mayor satisfacción que puedes tener.
Un socio de confianza
Zm - Ha mencionado en rueda de prensa la cantidad de fondos asignados y los proyectos en marcha. Pero, ahora, me gustaría que nos contara qué es para usted Red.es y qué ha logrado en estos nueve meses que lleva al frente. ¿Cuál considera que ha sido el hecho diferencial?
JH - En el contexto actual, donde la digitalización ha explotado, creo que el mayor logro de Red.es ha sido convertirse en un socio de confianza para muchos estamentos en este país. Anteriormente, nuestro trabajo se centraba en proyectos muy innovadores pero de nicho, algo bastante particular. Ahora, todo lo que hacemos está en la agenda pública, es lo que demanda la sociedad, y sobre todo, es el motor clave para la transformación de nuestra economía.
Lo mejor que hemos hecho en este tiempo ha sido adaptarnos al nuevo escenario. No hemos dejado de lado lo que solíamos hacer, pero ahora estamos ayudando de manera más amplia. Por ejemplo, con el Kit Digital, hemos proporcionado herramientas y asesoría a las pymes para que puedan digitalizarse. También con la Oficina Nacional de Emprendimiento, estamos apoyando a startups y emprendedores. En términos de conectividad, hemos mejorado la infraestructura, ayudando a sectores como la educación y la sanidad. Hemos conectado centros de investigación a través de la red de RedIRIS y lanzado proyectos como Smart Cities. Aspectos claves que también hemos abordado son las tecnologías emergentes, como el 5G aplicado al sector público y los avances en tecnología cuántica. Creo, sinceramente, que estamos liderando estos proyectos para que España esté a la vanguardia en estas áreas.
Zm - Además de la innovación tecnológica, ¿han tenido en cuenta las preocupaciones sociales relacionadas con el avance digital?
JH - Absolutamente. Una parte importante de lo que hemos hecho es escuchar las preocupaciones de la sociedad en torno a los derechos digitales. La gente está inquieta por temas como la privacidad, el teletrabajo o el impacto de la tecnología en la vida diaria. Por ejemplo, muchos padres están preocupados por el tiempo que sus hijos pasan frente a las pantallas y hay debates sobre el uso de móviles en las escuelas. En respuesta a todo esto, estamos trabajado con más de 50 organizaciones y 150 empresas para crear la Carta de Derechos Digitales, un proyecto que atiende directamente estas preocupaciones ciudadanas.
Zm - ¿Cómo ha cambiado internamente Red.es en este proceso de adaptación?
JH - Hemos trabajado mucho en la automatización de procesos y en la formación interna de nuestros equipos. De hecho, hemos puesto en marcha un programa de formación en inteligencia artificial (IA), donde todos estamos aprendiendo desde lo más básico, con el fin de entender bien cómo esta tecnología puede mejorar nuestro trabajo.
Además, queremos que las ayudas que ofrecemos sean accesibles y fáciles de gestionar. Nuestro objetivo es que las empresas se concentren en cómo utilizar las ayudas, no en los trámites para pedirlas. Eso también forma parte de nuestro compromiso para ser una entidad eficiente y ejemplar.
Proyectos que tienen impacto
Zm - Entonces, en concreto, ¿cuál diría que ha sido el mayor logro de Red.es durante su gestión?
JH - Lo mejor que hemos hecho, hasta ahora y teniendo en cuenta que sólo llevamos trabajando nueve meses, ha sido saber dónde teníamos que estar y adaptarnos rápidamente para convertirnos en un actor relevante en esta nueva era digital. Creo que nos hemos ubicado correctamente y hemos puesto en marcha proyectos que tienen impacto, tanto en el ámbito empresarial como en el social y el público. Hemos conseguido tener una visión global: apoyamos a las empresas, a la sociedad, a los servicios públicos y, a la vez, trabajamos en ser una entidad ejemplar dentro del sector público. Esa capacidad de abarcar todas esas áreas es lo que más me enorgullece.
Zm - Viene usted de trabajar con Carme Artigas, una persona cuya energía es abrumadora. ¿No es así?
JH: Sí, es cierto. Ella va siempre cien mil metros por delante, y eso, en ocasiones, genera incomprensión. Pero es admirable.
El choque contra la Administración Pública
Zm: ¿Cómo es el choque cuando uno llega de ese dinamismo y se encuentra con una entidad pública donde todo se mueve tan lentamente?
JH: Es un reto. Lo bueno es que cuando te ves obligado a hacerlo, no te queda más remedio que avanzar. Nos hemos reinventado en muchas áreas, y eso ha sido clave. Nos preguntamos constantemente si el esfuerzo vale la pena. Si lo que vamos a hacer realmente marca una diferencia, aunque sea más complicado para nosotros, aunque implique más trabajo. Y la respuesta suele ser que sí. Porque al final, nuestro trabajo no es solo lanzar convocatorias, sino asegurarnos de que cumplen con su objetivo.
Zm: Hablando de reinvención, ¿cómo se logra que el equipo se adapte a esta velocidad? ¿Cómo se llega a aumentar la productividad en un 400% en tan poco tiempo?
JH: Tenemos un equipo de directores y técnicos con una trayectoria sólida. Personas como Luis, Francisco, que han trabajado en proyectos clave como el Plan Avanza dentro del Ministerio. Eso facilita mucho las cosas. Cuando ya sabes lo que haces, puedes centrarte en ajustar detalles que antes parecían imposibles de abordar. Ahora nos preguntamos si cada paso del proceso es claro, útil y eficiente, y no dudamos en consultar al sector privado para asegurarnos de que vamos en la dirección correcta.
Zm: Me da la impresión de que su intención en el trabajo no es solo de cumplimiento, sino también aspiracional, por lo cual, lo felicito, ya que es un enfoque que debería estar más presente en la administración pública.
JH: Totalmente. Es aspiracional y queremos dejar una huella. Red.es, en muchos sentidos, actúa como un conector entre el Gobierno y la sociedad. Estamos en medio de un proceso, intentando que todo cuadre, y eso no es fácil. Pero es apasionante.
Lograr que la ciudadanía no se quede atrás
Zm: En ese papel de conexión, ¿cómo pretenden lograr que la ciudadanía no se quede atrás en el proceso de digitalización? A veces da la sensación de que, por más que se evangelice, siempre hay falta de conocimiento.
JH: Es un gran desafío. La brecha de formación es más grande de lo que pensamos. A menudo hablamos de brechas digitales relacionadas con la geografía o la economía, pero la de formación es crítica. Los llamados ‘nativos digitales’ saben usar redes sociales o jugar a videojuegos, pero les falta conocimiento técnico. Nos hemos dado cuenta de que no es solo una cuestión de acceso, sino de formación profunda en habilidades digitales. Es un desafío que debemos afrontar con urgencia.
Desde el día que hicimos la entrevista, Red.es ha comunicado que iniciaba el Tour EnRed 24/25 con el objetivo de recorrer España acercando los programas e iniciativas impulsados por Red.es; han lanzado el Bono de Conectividad con 48 millones de euros para pymes y autónomos y han renovado, junto a la Federación Española de Municipios, su compromiso con el impulso de las ciudades y territorios inteligentes. Además, han recibido premios y desarrollado actividades internacionales.
Volvemos a la idea inicial: Red.es merece otros titulares que no son los que los vinculan a episodios temporales que como el granizo pasarán. Su trabajo, si está bien hecho, perdurará en la sociedad.