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Prueba ZTE Axon Elite, me siento seguro
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Prueba ZTE Axon Elite, me siento seguro

martes 22 de diciembre de 2015, 17:21h

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Si hay dos elementos importantes en el mundo móvil esos son la seguridad y la innovación y ambos se conjugan en el nuevo terminal de la empresa china, ZTE. Y es que, en un mercado tan competitivo, es de agradecer que salgan cosas diferentes y, en ese sentido, este móvil sobresale. Sus sistemas de seguridad lo diferencian de la competencia. Se puede desbloquear con un patrón, con huella dactilar, con la voz o con la lectura del iris de los ojos.
Prueba ZTE Axon Elite, me siento seguro

En cuanto a diseño, el Axon Elite es grande. Sólo está disponible en color champagne. Es compacto y, no pesa mucho, pese a sus medidas de 15,4 x 7,5 x 0,9 cm. Al tacto tiene una buena respuesta. Sus acabados y su composición de magnesio y aluminio, materiales nobles empleados en aviación, lo dotan de una resistencia sin igual.

De frente el móvil tiene una pantalla de 5,5”, la medida más popular de este año. Ocupa gran parte del frontal, aunque hay bastante espacio alrededor, sobre todo por la parte superior. En la delantera también vemos su cámara de 8MP y el altavoz. Sí, sólo tiene uno, aunque parezca que tenga dos ya que por simetría, los de ZTE han hecho una falsa salida de audio.
En el lateral derecho está el botón de encendido. En el contrario vemos el volumen, que no queda muy cómodo de calibrar cuando lo tenemos con una mano. En el mismo lugar están las ranuras para micro SD hasta 128GB y para las SIM; ya que este móvil es dual. Respecto a la capacidad de almacenamiento, el Axon Elite ofrece 32GB, más que suficiente para guardar documentos gráficos y de cualquier otro tipo.

En la parte trasera es cuando vemos otra innovación de este smartphone. Aparte de su cámara principal de 13MP, también hay una de 2MP


En la parte trasera es cuando vemos otra innovación de este smartphone. Aparte de su cámara principal de 13MP, también hay una de 2MP que está preparada para captar los fondos en las fotos. Realmente hace buenas instantáneas, aunque a un smartphone de unos 450 euros se le puede exigir algo más. Para acabar esta fotografía exterior del gadget, hay que nombrar su puerto microUSB en la parte inferior y su salida de audio para Jack 3.5, en la superior.

Hardware potente

El hardware del Axon Elite nos ofrece un móvil tope de gama. Lleva integrado un procesador octacore Qualcomm 810, que nunca hemos notado que se sobrecaliente (problema que se le ha atribuido a la primera generación de este chip desde que salió), incluso haciendo varias tareas a la vez o jugando a juegos con grandes requerimientos. A este poderoso corazón lo acompañan 3GB de RAM y una batería de 3.000 mAh que permite un día y medio de uso prolongado. Su tarjeta gráfica es una Adreno 430, que despliega una resolución de pantalla FHD (1920x1080), con una densidad de pixeles de 401 ppp. La calidad del display es óptima y se disfruta del contenido audiovisual como con los mejores terminales del mercado.

Software muy personal

Si algo tienen los modelos chinos son su saturación de aplicaciones y herramientas en sus menús. Esto es posible que guste mucho en Asia, pero a los europeos (es nuestra impresión) nos resulta más útil y eficaz tener pocas y útiles, para disfrutar de interfaces limpias. Respecto al SO, este móvil lleva el Android 5.0 Lollipop.
Es cierto que el Axon Elite ofrece una gran variedad de formatos de menú y de presentación, que dotan al usuario de un gran poder de personalización del dispositivo. Se puede elegir la composición y color de los iconos e incluso las transiciones entre las páginas.
En definitiva, este teléfono es el más económico de los terminales de alta gama que compiten, actualmente, en el mercado y reúne una gran variedad de innovaciones. Sus puntos fuertes son su seguridad, con varias formas de desbloqueo y su hardware que lo pone en primera línea. Si tenemos que mencionar algo malo, es, como hemos dicho, que la calidad de las fotografías no llega a competir con los más grandes en este campo, aunque hay que ser justos y subrayar que su modo ‘Bokeh’, capaz de resaltar diferentes profundidades de las imágenes, funciona bastante bien y aporta una innovación de la que otros adolecen.

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