El Surface Laptop 4 recoge las grandes cualidades de los portátiles, pero sumando la pantalla táctil como ya es habitual en sus generaciones anteriores, aunando rendimiento con funcionalidades.
Diseño
Microsoft apuesta en esta ocasión con dos atractivos colores (plateado y negro) en mate y con su tejido Alcántara (hay opción metálica también), similar al ante o terciopelo, alrededor del teclado y del trackpad en el caso del modelo de 13,5 pulgadas que hemos probado, mientras que el de 15 solo cuenta con metal.
Estamos ante un equipo con uno grosor de 1,45cm y un peso de 1,26kg por lo que es un equipo que no destaca ni por su ligereza ni delgadez, pero sí por sus capacidades de productividad.
Pantalla y teclado
Los de Redmond apuestan por una pantalla PixelSense táctil con multitoque de 10 puntos con un tamaño de 13,5 pulgadas con una resolución de 2256x1504px con una densidad de 201ppp. A ello se suma una relación de aspecto 3:2, facilitando la lectura y visualización de los contenidos, una propuesta que optimiza el trabajo en una ventana única maximizada.
La calidad de la pantalla es realmente buena, tanto para trabajo como para videojuegos, contenidos multimedia y navegación web, con una definición y calibración de primer nivel que coloca al Surface Laptop 4 entre las mejores pantallas de un portátil. Por buscarle pegas a este panel podemos hablar de su construcción y es que Microsoft mantiene unos marcos ligeramente amplios.
También hay cosas buenas que ver en el teclado y trackpad que ofrecen una resistencia a la pulsación ligera, con una sensación muy buena y, por si fuera poco, se suma a ello la pantalla táctil, aumentando el número de posibilidades.
Si buscamos quejas aquí, podemos señalar la falta de sensor de huella dactilar, aunque esto lo resuelve muy bien Microsoft con el reconocimiento facial.
Rendimiento y conectividad
Microsoft permite ahora elegir entre un Intel Core de 11ª generación o un AMD Ryzen 4000 en un modelo especial preparado por AMD para Microsoft con mejoras interesantes en rendimiento y consumo.
El equipo mantiene un buen rendimiento en todo momento, aunque con ligeros recalentamientos en algunos usos de alta computación
Sorprende que el equipo mantiene un buen rendimiento en todo momento, aunque con ligeros recalentamientos en algunos usos de alta computación, como en algunos videojuegos. En general no se escuchan los altavoces prácticamente en ningún caso, salvo en estas ocasiones de sobrecalentamiento cuando trabajan a mayor velocidad y se escuchan.
Estamos ante un salto cualitativo en la versión probada Intel Core i5 de 11ª generación con una RAM de 8GB), con características aparentemente simples (especialmente en la RAM, que se queda algo corta para lo que ofrece la competencia), pero con una experiencia de primer nivel durante toda la prueba (un mes) de teletrabajo intenso con edición de fotografía y vídeo, escritura, multitarea, amplia navegación web con varias pestañas, reproducción de vídeo y audio en streaming y videojuegos.
Cabe señalar que se opta por una asombrosa falta de puertos (un puerto USB tipo C; un puerto USB tipo A; un puerto Surface Connect, magnético de carga, propio de los equipos Surface; y un puerto mini jack de 3,5mm). Aquí hay un nuevo ‘pero’ que sumar a la lista y es que en el conector de carga, pese a ser magnético tiene un formato que no facilita los cambios de postura: funciona a la perfección sobre una superficie lisa como una mesa, pero no tanto si pasamos el equipo a la cama o al sofá donde no es tan plan y el cable tienda a soltarse con facilidad.
En materia de conectividad, contamos con WiFi 6 compatible con 802.11ax y Bluetooth 5.0. Además, integra un Chip TPM 2.0 para seguridad empresarial y compatibilidad con BitLocker.
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Cámara y audio
Por otro lado, Microsoft opta por una webcam sencilla de 720p que cumple a la perfección de su función tanto de webcam como de reconocimiento facial, aunque se echa en falta que no se avance en este apartado, sobre todo teniendo en cuenta el auge del teletrabajo y videollamadas de los últimos meses.
A ello se suman unos altavoces Omnisonic con Dolby Atmos y dos micrófonos de estudio de campo lejano. La calidad es aceptable, suficiente para un uso sencillo sin grandes pretensiones.
Batería
Por otro lado, Microsoft incluye una batería de 47,4WH prometiendo una autonomía de unas 17 horas que en la realidad (durante la prueba) nos permite cubrir, sin problema, una jornada de trabajo (8 horas) y algo extra de tiempo para entretenimiento (entorno a las 10 horas de autonomía), aunque sufre con los videojuegos permitiendo en algunos casos, como con el Age of Empires III, unas 4 horas de autonomía en estos casos.
Conclusión
El Microsoft Surface Laptop 4 es uno de los portátiles mejor construidos con sensación premium tanto en carcasa como en teclado, pero especialmente con la calidad de la pantalla, una de las mejores que nos hemos encontrado en un portátil.
Como contrapartida encontramos el Surface Connect, el puerto especial de carga magnético de Microsoft que no responde correctamente en todo momento
El equipo es perfecto para el teletrabajo, con un panel grande, un touchpad amplio y un teclado que responde de forma correcta en todo momento ofreciendo un tecleo rápido y cómodo.
Como contrapartida encontramos el Surface Connect, el puerto especial de carga magnético de Microsoft que no responde correctamente en todo momento y que en alguna ocasión es complicado hasta conectarlo. También hay que señalarla la cámara que si bien es correcta, se queda corta respecto a otras ofertas del sector.
En general es un portátil de muy alto nivel, pero que ha dejado pasar la oportunidad de convertirse en el mejor de su gama por fallos que la compañía lleva tiempo arrastrando.
Nota: 8/10
Lo mejor: La pantalla
Lo peor: La cámara y el Surface Connect
Si (
No(
