Clara tendencia en el merecado de la tecnología, un año después de su lanzamiento, Microsoft Surface Pro 4, con sistema Operativo Windows 10, tiene la peculiaridad de ser una tableta que se transforma en un portátil ligero y tiene la capacidad de gestionar todo el software que manejamos en nuestro ordenador habitual. El publico considera que el pilar de su éxito es su gran pantalla de alta resolución, aún más delgada, combinada con un procesador Intel Core i7.
Qué opinan los consumidores de la Surface Pro 4
Después de un año de la presentación oficial, el híbrido de Microsoft, la Surface Pro 4 parece que ha tenido un fuerte impacto en el mercado mundial; o al menos haber despertado mucha curiosidad entre los internautas quienes lo consideran el mejor sustituto de un ordenador o un portátil. La cuestión de la batería sigue siendo la principal característica a tener en cuenta para los posibles compradores.
Con un ciclo de interés bastante regular y su punto álgido en el mes de noviembre, han sido miles los usuarios que, a través de diferentes medios ha querido dejar clara su opinión. Así hay quien considera que "Microsoft ha encontrado por fin su eje y la nueva Surface un mounstro de la productividad". En tono positivo también destaca el parecer de un comprador qaue afirma que "depués de dos semanas de uso de la Surface, para trabajar, me soprende que fácil es cambiar de trabajar en un 'notebook' a una cómoda tableta". Por último hay quien considera que "Microsoft ha puesto el listón muy altocon la última Surface y si el dinero no es un problema (es caro) o se busca un potente PC esta es una opción fantástica". (Fuente Watson Trends)
En estos días, aprovechando la llegada del verano y en el mercado americano, por la compra de una Pro 4, los de Redmon te regalan una XBox One. Basta con pedir enla tienda on line de la compañía los dos productos, y a la hora de pagar, el precio de la consola desaparece.
Prueba de producto
Junio de 2012; Steve Ballmer, ex CEO de Microsoft, salía a la palestra y presentaba un nuevo producto, diseñado en Redmond, que nacía para intentar paliar el daño que Apple estaba haciendo a la compañía. Su nombre: Surface. Sus aspiraciones: la de ser una tableta que renovara las ya existentes y equipada con Windows. El resultado: aluvión de críticas y comparaciones, más emocionales que reales, para un dispositivo que tenía magníficas intenciones. Suponemos que Microsoft se sometió a su propio examen de conciencia y todos sabemos bien que aquel producto evolucionó hasta convertirse en lo que es hoy: probablemente, uno de los mejores equipos ligeros del mercado.
A finales del 2015, Surface Pro 4 cobró vida en las tiendas (se presentó en octubre) y llegó con novedades técnicas reseñables y una asistente personal que presume de inteligencia e incluso imagen, llamada Cortana, que ha tenido el mismo efecto sobre Siri (Apple) que Charlize Theron sobre Sharon Stone en el mundo del cine.
Surface Pro 4 es un 30% más rápida que su antecesora Pro 3, tiene unas dimensiones de 29.21 x 20.14 x 0.84 cm, pantalla de 12.3 pulgadas PixelSense con una resolución 2736x1824 (267 ppi)
Básicamente, y en términos generales, Surface Pro 4 muestra las siguientes credenciales: es un 30% más rápida que su antecesora Pro 3, tiene unas dimensiones de 29.21 x 20.14 x 0.84 cm, pantalla de 12.3 pulgadas PixelSense con una resolución 2736x1824 (267 ppi). Además, integra la 6ª generación de procesadores Intel CoreTM m3, CoreTM i5 o CoreTM i7. En cuanto a la memoria, tres modelos de 4 GB, 8 GB o 16 GB RAM y almacenamiento interno SSD PCIe 3.0: 128 GB, 256 GB, 512 GB o 1 TB. Destaca el nuevo Stylus con menor latencia, comprensión de apoyo de la palma de la mano y reconocimiento de 1024 niveles de presión (se ha aprendido mucho de los Note de Samsung).
Sentados estos principios, hay mucho que contar; mucho más de lo que permiten tanto los espacios periodísticos, medidos en el papel como los tiempo de lectura sobre pantalla en la web.
Estrenamos Surface Pro 4
A primera vista, una caja limpia y práctica con tres elementos básicos en su interior: la tableta, el cargador y el lápiz.
De menor a mayor importancia, señalar que el sistema de carga, que sí hace alarde de diseño, es propietario, un detalle que es común en el mundo de los PCs, pero que no suele ser muy bien aceptado en el de la movilidad, donde hay unos estándares que hasta ahora sólo se saltaba Apple -como es habitual en un entorno híper cerrado- y que se toleran porque allá donde vamos, casi siempre encontramos un cargador MicroUSB o Lighning o incluso es fácil comprar una batería auxiliar que te saca del apuro, pero la Surface te obliga a desplazarte con el cargador, y no es pequeño.
Bien es verdad que Microsoft pretende que éste sea un producto profesional que lo instala dentro del mundo de la informática y que los tiempos de batería rondan las 9 horas (consumiendo video, según el fabricante).
Stylus Pen
El lápiz óptico que acompaña al producto ha evolucionado considerablemente desde las versiones anteriores. El diseЦo es no sólo cuidado, sino también curioso, porque el imán que le permite permanecer asociado a la tableta es bastante potente. La latencia a la hora de escribir es inapreciable, lo que le aporta una experiencia de uso bastante natural. La punta es fina (fundamental) y reconoce infinitos grados de presión. Tiene dos botones, el lógico en cualquier bolígrafo, en la parte superior y otro escondido al final del imán. Con el primero y un toque abrimos One Note para escribir inmediatamente; si el toque es prolongado activamos Cortana. El segundo nos sirve, por ejemplo, para recortar y mover la selección realizada.
No hay que olvidar que el stylus debe estar asociado a la tableta por Bluetooth, emparejamiento que se hace desde el apartado de configuración, dispositivos (hay que mantener presionado el pulsador del boli unos siete segundos para que se active el emparejamiento).
La experiencia de uso es superior.
La tableta Surface
Por último, la tableta, que en apariencia no difiere mucho de las anteriores pero que, al menos en el modelo de prueba, el rendimiento y los tiempos de reacción son magníficos. Por supuesto viene aderezada con Windows 10, que no es cuestión menor y una prueba de la versión de Office 2016 para 30 días. El ecosistema de Microsoft en la nube es algo que todo el mundo debería dominar si quiere sacar rendimiento a su vida digital y aumentar su nivel de productividad. Un detalle más en el software: el modo lectura del nuevo navegador Edge. ¡Sencillamente, hay que probarlo!
Importante, un puerto USB 3.0, lector de tarjeta microSD (escondido en la trasera), toma de auriculares, mini DisplayPort, puerto de funda y SurfaceConnect. En conectividad inalámbrica, una cuestión ya muy básica: WiFi AC, tecnología inalámbrica que permite asociar el terminal a un router con banda de 5 GHz y navegar con velocidades de transmisión muy altas.
El sistema de sujeción a los teclados, formarán parte de otro capítulo, pero sumado al pie trasero, sigue siendo un magnífico invento
El precio de la Surface Pro 4 ronda los 1.000 euros. ¿Caro? Sí. ¿Lo vale? También. Más que otros de precio mayor y que aportan menos funcionalidad.
