Las organizaciones españolas que cuentan con una infraestructura de inteligencia artificial sólida tienen nueve veces más probabilidades de trasladar sus pilotos a producción y un 70% más de opciones de generar valor medible, según el Cisco AI Readiness Index 2025, un estudio que analiza el grado de preparación de más de 8.000 líderes empresariales en 30 países.
En España, solo el 13% de las empresas se sitúan en la categoría “Avanzada”, lo que las coloca por detrás de la media global. Sin embargo, el 79% planea implementar agentes de IA y casi el 40% prevé que trabajen junto a los empleados en menos de un año, a pesar de que muchas carecen de la infraestructura segura necesaria para soportarlo.
“El futuro no se trata de chatbots, sino de agentes capaces de ejecutar tareas de forma autónoma”, ha afirmado Jeetu Patel, presidente y director de Productos de Cisco. “Las organizaciones que prioricen la IA ahora obtendrán una ventaja competitiva clara”.
El informe también revela una brecha estructural en las empresas españolas, marcada por la falta de datos centralizados, la escasa capacidad de GPU y la baja flexibilidad de sus redes: solo el 12% considera que su infraestructura puede escalar proyectos de IA. Además, el 47% prevé un aumento de las cargas de trabajo superior al 30% en los próximos tres años, lo que podría agravar lo que Cisco denomina la “deuda de infraestructura de IA”, es decir, la acumulación de carencias tecnológicas que frena el progreso y la innovación.
En palabras de los analistas, las compañías más avanzadas han convertido la seguridad y la gestión del cambio en una fortaleza, mientras que muchas empresas españolas aún deben reforzar su base tecnológica y cultural para competir en la nueva economía impulsada por la inteligencia artificial.