La lucha de Google contra los malos anuncios

La publicidad es una parte fundamental de Internet. Su retribución es uno de los principales sustentos de los editores y los creadores de contenido. Pero la publicidad también tiene sus límites y Google se encarga de vigilar si las prácticas se realizan dentro de la legalidad y que no ponen en peligro los intereses de los usuarios.

“En Google tenemos unas estrictas políticas para controlar tanto los anuncios que permitimos como los que no, para proteger a nuestros usuarios de aquellos anuncios engañosos, inapropiados o dañinos. Contamos con un equipo de ingenieros, expertos en normativa publicitaria, y directores de producto en todo el mundo, que luchan día a día contra la “mala publicidad””, afirman en el blog de la empresa.

Tipos de anuncios malos

Uno de los más habituales se estos malos anuncios es el que promociona actividades ilegales, como productos farmacéuticos no regulados o médicos sin cualificar. Google detectó más de 68 millones de estos anuncios, lo que representa un aumento desde los 12,5 millones.

En otro estante tenemos los anuncios engañosos que presentan productos o servicios de manera que no se corresponde con la realidad. En 2016, se retiraron cerca de 80 millones de malos anuncios por engañar, mentir y asustar a los usuarios.

Los anuncios malos también están en el mundo móvil. Así, se ha observado un incremento de esos malos anuncios, sobre todo de los de auto clic que descargan apps sin nuestro permisos.

Medidas de Google para evita los malos anuncios

"Cuando encontramos anuncios que infringen nuestras políticas, realizamos las acciones necesarias para retirar el anuncio y, a veces, vamos contra el anunciante, dependiendo del tipo de infracción cometido. Pero si el asunto guarda relación con los productos, servicios o contenidos que promociona el anunciante, también actuamos contra el sitio web al que accede el usuario cuando hace clic en un anuncio", concretan en el blog oficial.