La pandemia de la COVID-19 ha marcado un punto de inflexión con un horizonte lleno de nuevos retos que se suman a los ya antiguos. Todos los europeos han despertado por fin a la realidad de que: Europa es un seguidor en Digital que hoy es la tecnología habilitadora de facto; la transformación verde es el nuevo acuerdo para un futuro sostenible; no habrá una transición totalmente digital ni verde sin la Investigación e Innovación y la financiación adecuada para ambas; Europa necesita invertir en talento y habilidades y en la nueva generación de innovadores; la innovación y la adopción tecnológica pueden ser una fuente de división y el sector público y el privado deben trabajar de la mano, aprendiendo el uno del otro.
La tecnología está entrando en una nueva era.
Durante las últimas tres décadas, en el marco institucional del principio de subsidiariedad, la Política Industrial, los Programas de Investigación y las Estrategias de Educación y de las PYMES son los ejes en los que la UE ha invertido importantes esfuerzos y recursos en diversos grados.
La tecnología está entrando en una nueva era y las nuevas innovaciones han surgido a un ritmo acelerado. El ejemplo más destacado de hoy es el moonshot parcialmente europeo que conduce a la primera vacuna basada en ARNm, pero el software y el hardware, la tecnología profunda y la tecnología verde son también áreas en las que Europa no puede quedarse atrás. Tecnologías como la biología sintética, la tecnología espacial, la IA, la computación cuántica, la nanotecnología o la robótica están surgiendo y convergiendo más rápidamente. Esta aceleración global requiere talentos, habilidades y un ecosistema que conecte a las startups con los inversores, las empresas, el mundo académico y los responsables políticos, las PYME y los ciudadanos.
Un lienzo en blanco para Next Innovation EU
La UE alberga actualmente el 7,2% de los unicornios del mundo. La suma del valor de todos los unicornios de la UE más los actuales campeones tecnológicos y digitales de la UE que ya son públicos empequeñece el valor de las grandes empresas tecnológicas actuales no pertenecientes a la UE.
La próxima UE de la innovación tendrá que fijarse en las startups que muestren una gran ejecución, una fuerte propiedad intelectual y una ciencia profunda, y una combinación de todo ello. La tecnología digital permite cada vez más el trabajo inteligente, pero también el "trabajo en el sur", mientras que la tecnología verde suele requerir instalaciones de producción que puedan ubicarse en zonas donde el subdesarrollo económico y el desempleo son mayores.
El Next Innovation EU moonshot tendrá que impulsar la innovación europea en direcciones claras para garantizar que la nueva generación de innovadores se convierta en la piedra angular para encontrar la solución a los principales retos de Europa. Estas deberían ser las principales direcciones:
- Soberanía tecnológica: garantizar que la innovación produzca una autonomía tecnológica estratégica europea a través de un instrumento de "ScaleUp Europe" que alimente a las nuevas empresas tecnológicas digitales europeas para que se conviertan en gigantes tecnológicos mundiales de la UE, con el fin de alcanzar el objetivo de la Década Digital.
- Transformación verde: garantizar que la innovación contribuya al éxito de la transición verde. Los objetivos ambiciosos requieren discontinuidad. Solo las startups tienen la mentalidad necesaria para cruzar el abismo.
- Liderazgo en deep tech: garantizar el liderazgo de Europa en la próxima ola de innovación impulsada por el deep tech, desde los "bits" hasta los "átomos y bits".
- Cohesión de la innovación: garantizar que la innovación sea esencial para la cohesión territorial y el crecimiento en la UE. Nadie debe quedarse atrás, desde las ciudades hasta las zonas rurales.
“La innovación es una cultura. Debemos difundirla a través de una narrativa europea renovada y claramente identificable sobre las startups para mejorar su alcance entre el mundo académico, los ciudadanos, las empresas, los empresarios, los inversores y los responsables políticos a nivel local, regional, nacional, europeo e internacional, como están haciendo los Estados Unidos y el Lejano Oriente a escala mundial para promover a sus campeones”, relata el documento de la Comisión Europea.
Fondo Tecnológico Soberano de la UE
Un Fondo Europeo de Tecnología Soberana específico aunaría los esfuerzos de toda la UE para garantizar que Europa va en la dirección correcta para asegurar la soberanía económica, proteger la prosperidad y el bienestar a largo plazo, y mantener, salvaguardar y desarrollar su interés estratégico, en particular en los sectores industriales del futuro.
La innovación es una cultura.
El fondo debería utilizar la financiación pública europea para apalancar al menos 100.000 millones de euros de financiación pública/privada con el fin de anclar a los campeones europeos y atraer así el capital privado. El Fondo Europeo Soberano de Tecnología también estimularía la aparición de un nivel adecuado de gestores de fondos competentes con un sólido conocimiento de lo digital y de la tecnología, especialmente de la tecnología profunda.
Fondo Soberano de la UE para la Tecnología Verde
El papel de las startups es clave teniendo en cuenta que la digitalización es un habilitador crucial para el Green Deal. Una inversión sustancial en las capacidades digitales estratégicas europeas, así como en el desarrollo y el amplio despliegue de las mejores tecnologías y soluciones digitales, proporcionará soluciones inteligentes, innovadoras y adaptadas para hacer frente a las preocupaciones relacionadas con el clima en ámbitos como el ahorro y el almacenamiento de energía, la movilidad compartida, la agricultura, etc.
Establecer un Fondo de Tecnología Verde con la ambición de utilizar la financiación pública europea para apalancar al menos 10.000 millones de euros de financiación pública/privada para anclar a los campeones europeos y así atraer el capital privado. El modelo de funcionamiento del fondo debería tener un enfoque a largo plazo, ya que las nuevas empresas de tecnología verde y las empresas en fase de expansión suelen requerir mucho capital y tienen un plazo de comercialización y de obtención de beneficios mucho más largo que la media.
Marco del IPCEI ampliado para el deep tech
Se necesita más tiempo y capital para crear una empresa emergente de tecnología avanzada y ampliarla hasta la producción en serie o en masa, debido a los largos ciclos de desarrollo y venta de la tecnología y a la gran intensidad de capital de la I+D y la primera fase de despliegue industrial.
A nivel de la UE, Horizonte 2020 es muy competitivo y es una fuente de financiación poco fiable para las ampliaciones, y además está destinado únicamente a la fase de I+D+i del proyecto. Los sistemas de financiación de la innovación del IET (CCI) no reflejan los principios de investigación/innovación/mercado abiertos de la UE, ya que el acceso a la financiación depende del pago de cuotas de afiliación bastante elevadas, lo que perpetúa la brecha de la innovación, no solo entre los Estados miembros de la UE, sino también entre los agentes industriales ya establecidos y las empresas de nueva creación/escalada.
En esencia, las opciones de financiación actuales tienen al menos una, y algunas de ellas varias de estas características: fragmentadas en términos de apoyo a una sola parte o fase del proyecto; sustancialmente inferior en valor, insuficiente para impulsar el crecimiento real; acceso limitado; carecen de elementos integradores para conectar a los socios en los proyectos de colaboración.
Se busca utilizar el modelo de la Alianza Europea de Baterías para otros verticales de tecnología profunda: computación cuántica, 6G e hidrógeno y cambiar la regulación (Comunicación de la CE sobre IPCEI) para que los costes de inversión de CAPEX para los proyectos de alta intensidad de CAPEX también deben ser apoyados. Los mecanismos de financiación para cada socio del proyecto deben armonizarse y sincronizarse para permitir una fecha de inicio del proyecto igual y una ejecución satisfactoria del mismo, basándose en la notificación de la CE suficiente para la adjudicación del contrato a nivel de los Estados miembros.
Tarjeta azul 2.0 de la UE
Para desarrollar una innovación de categoría mundial en Europa, competir con otros agentes mundiales y estimular el éxito económico global, las empresas y los Estados miembros de la UE dependen en gran medida del talento. El acceso al talento puede garantizarse o bien asegurando la disponibilidad de talento "local" a través de la educación en Europa o bien pudiendo atraer a personas con talento de fuera de la UE. En la práctica se necesitan ambas cosas para tener éxito.
La UE debería mejorar el programa de la tarjeta azul de la UE con garantías de procedimiento que aseguren que las solicitudes de tarjeta azul para los talentos (y sus familias) se tramiten en el plazo de una semana desde su presentación. Para hacerlo posible, la UE debería destinar fondos para apoyar a los Estados miembros de la UE en la mejora de sus procesos de inmigración para que puedan cumplir con los plazos de solicitud propuestos.
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