Hackeo

El mercado de las criptomonedas, que había mostrado signos de recuperación en los últimos meses, enfrenta una nueva ola de desconfianza tras un robo bastante grave. Para quién no esté al tanto, el pasado viernes, el exchange de criptomonedas Bybit sufrió un hackeo que ha sido calificado como el mayor de la historia, esto supuso un robo de 1.500 millones de dólares en Ethereum (ETH) robados.

WhatsApp anunció el viernes que ha desbaratado una campaña de hackeo que tenía como objetivo a aproximadamente 90 usuarios, entre ellos periodistas y miembros de la sociedad civil.

Todo lo que hacemos está directamente relacionado con el tipo de ciberataque en el que vamos a caer. El volumen al que escuchamos la música, o cualquiera de nuestras aficiones son variables que determinarán nuestra vulnerabilidad a un ataque u otro.

Evitar virus informáticos, bulos o ser víctimas de phishing es un poco más fácil si sigues las siguientes recomendaciones.

La plataforma de vehículos compartidos Uber ha acordado pagar 148 millones de dólares después de que, en 2016, la compañía sufriera un hackeo y mantuviera oculto, durante un año, el robo de datos que afectó a millones de personas.

El Banco de Montreal y el Banco de Comercio Imperial de Canadá han informado del ataque cibernético a sus servicios. El hackeo ha afectado al menos a 90.000 clientes.

Tres expertos en seguridad informática de nacionalidad china han hackeado información de análisis de Moody´s, Siemens y Trimple. El Departamento de Justicia de Estados Unidos los acusa de robar información, fraude informático y robo de identidad de las tres compañías.

Han saltado todas las alarmas desde Telefónica sobre un ataque que ha infectado todos sus ordenadores. Las primeras noticias apuntan a China, cuya ofensiva, en un principio, parecía haber afectado también a otras grandes empresas como Vodafone, Banco Santander, BBVA o Iberdrola. Algunas de ellas ya han descartado alteración alguna en su actividad.

Más de 32 millones de credenciales de acceso a la red social Twitter han sido robadas gracias a un sistema de ‘malware’ que ha afectado a los navegadores y ha permitido a los hackers obtener millones de datos de usuarios.

En estos días, la compañía de contenido en streaming se encuentra restableciendo las contraseñas de sus usuarios. Netflix ha llevado a cabo este “reseteo” en las cuentas de aquellos clientes que utilizan la misma contraseña para su web y para otras cuyos datos han sido filtrados.