Intentando huir de la dependencia que existe actualmente con la tienda de aplicaciones de Google, tanto Huawei como Xiaomi planean unir fuerzas y desarrollar un nuevo método de descarga que pondrán en funcionamiento para el resto de países en los que operan. A pesar de que puede parecer algo complicado, es una de las mejores estrategias que podían haber ideado ambas compañías. Los dispositivos móviles que ofrecen son de una calidad excepcional pero si los usuarios occidentales no disponen de un servicio de descarga de aplicaciones fiable se vuelven inservibles.
China vuelve a la vida
En caso de hacer bien su trabajo y crear una tienda de aplicaciones con el reconocimiento y la confianza de los principales desarrolladores, las compañías chinas lograrán tomar distancia de Google y emprender un nuevo camino por separado que las distanciará aún más de la influencia y la forma de juego de los americanos. Además, evitarán riesgos futuros dejando de temer por los posibles futuros baneos de Estados Unidos.
A pesar de que la única compañía que actualmente sufre el bloqueo es Huawei, a la iniciativa se suman Xiaomi, Oppo y Vivo; que podrían verse perjudicadas en un futuro y han preferido tomar medidas preventivas. La unión pasaría a llamarse Alianza Global de Servicios para Desarrolladores (GDSA) y el proyecto podría salir a la luz este mismo mes de marzo de 2020, siempre y cuando el Coronavirus no atrase el trabajo de desarrollo.
Probabilidades de éxito
Huawei ya está intentando llamar la atención de las principales desarrolladoras sin mucho éxito, al parecer. Su nueva tienda App Gallery no cuenta con muchas de las principales aplicaciones por lo que el interés que genera es casi inexistente. A pesar de ello, la unión entre las cuatro principales compañías de electrónica chinas podría darle la vuelta al juego. Es importante recordar que China es el país que prohíbe el uso de los servicios de Google y que, por lo tanto, estas compañías ya están acostumbradas a tener que presentar opciones alternativas para su propio mercado nacional.
El último paso de este proceso sería llevar esas grandes plataformas independientes al mercado internacional, unificándolas y logrando llamar la atención de los desarrolladores. Esta tarea se podría asentar con más facilidad si echamos un ojo a las ventas a nivel mundial de estas empresas, las cuales acumulan en torno al 40% de las ventas totales a nivel mundial en el último trimestre del 2019, un dato importante para convencer a los desarrolladores.