Diseño
La nueva familia de dispositivos de Google suponen el mayor cambio estético para la marca Pixel desde que se presentó la sexta versión, acompañada por primera vez de un procesador propio. Ahora nos encontramos frente a unos dispositivos con un diseño más cercano al de sus competidores directos como Apple o Samsung, dejando atrás las formas más redondeadas y optando por cantos planos. El elemento de diseño más reconocible de los Pixel, el módulo de cámaras, también ha sufrido modificaciones, pasando de ser una franja que se extiende hasta los laterales del equipo a una isla alargada. Pese a este cambio, sigue manteniendo intacta la esencia Pixel.
Por su construcción nos encontramos con un equipo claramente de gama alta premium, con materiales de construcción de alta calidad como vidrio Gorilla Glass Victus 2 tanto en la tapa trasera, de tono mate, como en la pantalla, así como unos cantos de aluminio brillantes. Para la versión estándar Google ha optado por invertir los tonos para obtener unos equipos con la trasera brillante y los marcos en mate. En cuanto a los colores en los que está disponible este equipo, hay 4 opciones disponibles: Porcelana (blanco roto), rosa cuarzo, verde liquen y obsidiana.
Como su propio nombre indica, Pixel 9 Pro XL, se trata de un teléfono grande gracias a su pantalla de 6,8 pulgadas, con 16 centímetros de alto y 8,5 milímetros de grosor. Tampoco es un equipo especialmente ligero, llegando a superar los 220 gramos debido a sus materiales de construcción. Esto le otorga un toque de robustez que ayuda a la sensación de estar ante un dispositivo premium. En lo relativo a la disposición, el canto derecho queda reservado para el control de volumen y el apagado/encendido del teléfono. Como es habitual en los equipos de Google, las botoneras tienen recorrido y un buen sonido al presionarlas, no obstante cabe destacar que en nuestra unidad tenían algo de holgura lo que las hace “bailar” ligeramente.
En la trasera destaca especialmente el módulo de cámaras, que es bastante protuberante pero su forma alargada y centrada evita que el dispositivo se mueva en exceso al utilizarlo apoyado en cualquier superficie plana. Este módulo no contiene únicamente los tres sensores de la cámara principal y el flash LED, sino que se puede encontrar a su vez un termómetro que vía una aplicación preinstalada deja a los usuarios de los Pixel Pro medir la temperatura de objetos y en futuras actualizaciones, personas también. El canto izquierdo queda vacío y en el inferior se ubica el puerto de Carga USB C, la ranura para la tarjeta SIM y uno de los dos altavoces estéreo del dispositivo.
Pantalla y sonido
Una vez giramos el dispositivo y echamos un vistazo a su frontal encontramos su gran pantalla de 6,8 pulgadas, que en esta generación ha aumentado ligeramente su tamaño gracias a la reducción de los marcos, los cuales son completamente simétricos. Esta modificación proporciona al equipo un ratio pantalla-cuerpo de 88%.
El Google Pixel 9 Pro XL monta un panel al que la firma ha nombrado Super Actua Display. Se trata de una excelente pantalla con tecnología OLED y una resolución de 2.992 x 1.344, lo que proporciona una densidad de 486 píxeles por pulgada. La tasa de refresco máxima es de 120 Hz, pero el equipo cuenta con tecnología LTPO, que permite variar de forma dinámica la frecuencia de actualización de la pantalla. Esto significa que la velocidad a la que se refresca la imagen en pantalla se puede ajustar en un amplio rango, desde frecuencias muy altas con el límite de 120 Hz para este equipo en concreto, hasta frecuencias muy bajas incluso 1 Hz. La ventaja está en la optimización del consumo de energía de la pantalla, ya que sólo se actualiza la imagen cuando es necesario.
El Google Pixel 9 Pro XL monta un panel con tecnología OLED y una resolución de 2.992 x 1.344, lo que proporciona una densidad de 486 píxeles por pulgada. La tasa de refresco máxima es de 120 Hz, pero el equipo cuenta con tecnología LTPO.
Google lleva años refinando la calidad de sus pantallas y el Pixel 9 Pro XL es la mejor prueba de ello, con una excelente representación del color así como buenos ángulos de visión, sin cambios en la tonalidad del panel. Mención especial requiere el nivel de brillo, que en esta ocasión asciende hasta los 3000 nits de pico. La visibilidad del panel, por tanto, es muy buena incluso en días soleados. La pantalla tiene una relación de aspecto de 20:9 y cuenta con tecnología HDR10 y HDR10+ para la mejor calidad a la hora de visualizar contenido en plataformas como Youtube.
Bajo la pantalla se ubica el nuevo sensor de huellas dactilares, que por primera vez en la historia de los Pixel pasa de ser óptimo a ultrasónico, asignatura pendiente de los equipos de Google que ya estaba presente en algunos equipos de la competencia, como los Samsung Galaxy de gama alta. Esta tecnología emite ondas de ultrasonido que rebotan en la superficie del dedo. El sensor mide el tiempo que tardan las ondas en regresar, creando un mapa 3D detallado de la huella, incluyendo profundidad y textura. Se agradece el cambio ya que el sensor ultrasónico es más rápido y más fiable.
En lo relativo al aspecto sonoro, el Pixel 9 Pro XL cuenta con dos altavoces estéreo, uno situado en la parte superior del frontal y otro en el canto inferior. El sonido del equipo es muy bueno, llegando a niveles de volumen bastante elevados para ser un teléfono móvil, sin apenas dispersión en el sonido excepto en los niveles máximos.
Rendimiento y experiencia de uso
El apartado del rendimiento en los dispositivos de Google no ha estado exento de polémica desde la introducción del Tensor G1 con el Pixel 6. La decisión de Google de fabricar su propio chip para mejorar la optimización y funcionamiento del hardware con el software del equipo no ha gustado a todos los usuarios, especialmente a los heavy-user que requieren del máximo rendimiento.
El rendimiento en cuanto a potencia de los procesadores Tensor de Google no se puede equiparar con el de su contraparte de Qualcomm
No es ningún secreto que el rendimiento en cuanto a potencia de los procesadores Tensor de Google no se puede equiparar con el de su contraparte de Qualcomm (el Snapdragon 8 Gen3), solo hace falta realizar un benchmark para ver la diferencia entre los números. No obstante, en el uso real del día a día, la mayoría de usuarios quedarán plenamente satisfechos con el rendimiento de su Pixel 9 Pro XL ya que el sistema se mueve con agilidad y fluidez, tanto en las tareas más básicas como el desplazamiento por los menús como incluso en juegos con gráficos estándar.
El Tensor G4 es un procesador de 4 nanómetros y 8 núcleos que viene acompañado de la gráfica Mali-G715 MC7. Este sistema solo muestra que está por debajo del resto de gamas altas del mercado con otros procesadores al realizar tareas de alta intensidad, como la edición de video en 4K.
El Pixel 9 Pro XL viene con 16 GB de memoria RAM, un número elevado que está pensado especialmente para poder mover con fluidez todo lo relacionado con la integración de procesos de Inteligencia Artificial que se llevan a cabo en el propio dispositivo. Donde sí se le puede dar un pequeño tirón de orejas a Google es en el apartado de memoria interna, ya que la versión base del dispositivo (que tiene un precio superior a los 1000 euros) viene únicamente con 128 GB de almacenamiento, una cifra que se antoja algo escasa para un equipo de gama premium.
Si por algo destacan los Pixel en lo relativo a su experiencia de uso es en la limpia y funcional versión Android que presentan. Si bien estos equipos aún cuentan con Android 14 como sistema operativo, serán los primeros en recibir la 15. La versión Pixel del sistema operativo de la gran G incluye añadidos muy interesantes y prácticos que mejoran la experiencia, como la traducción inteligente, los subtítulos con transcripción automática o el reconocimiento constante de canciones. A esto hay que añadir la apuesta total de Google por la Inteligencia Artificial con la integración de Gemini en diversas aplicaciones como Gmail, Google Docs o Maps, por citar algunos ejemplos. Puedes pedir resúmenes o recordatorios con la información de contexto que obtiene la IA de estas aplicaciones. El asistente de Google convive con Gemini para las tareas más simples como la programación de una alarma o la gestión por voz de la domótica.
El Pixel 9 Pro XL viene con 16 GB de memoria RAM para poder mover con fluidez todo lo relacionado con la integración de procesos de Inteligencia Artificial que se llevan a cabo en el propio dispositivo
Los Google Pixel 9 vienen con un año de Gemini Advance de regalo, incluido en un plan Google One (por lo que también obtendrán otras ventajas como los 2 terabytes de almacenamiento en la nube) para que puedan probar y experimentar todas las funciones y ventajas que incluye la IA de Google. Si pasado ese año de prueba quieres seguir disfrutando de este plan Gemini Advance supondrá el desembolso de 260 euros anuales.
Cámara
El apartado fotográfico ha sido históricamente el principal punto de venta de los Google Pixel. Quizás ahora esto podría estar reñido con la excelente integración de la Inteligencia Artificial vía Gemini, pero bien es cierto que la IA tiene gran parte del mérito del buen hacer fotográfico de los Pixel.
El Pixel 9 Pro XL, al ser el modelo más avanzado de la familia junto a la versión Pro de tamaño estándar, incluye tres en vez de dos cámaras traseras. La principal tiene 50 megapíxeles y una apertura de f/1.68. Por otro lado se encuentra el gran angular, que este año aumenta el número de megapíxeles hasta los 48, exactamente los mismos que tiene la lente telefoto de 5 aumentos.
Como ya viene siendo habitual, las fotos que captura el Pixel 9 Pro XL son muy buenas, con un gran rango dinámico y nivel de detalle. En ciertas ocasiones hemos experimentado una notable pérdida de calidad al realizar un ligero zoom en la imagen ya capturada, lo que achacamos a un fallo en el procesamiento de dichas imágenes en concreto.
Las imágenes capturadas con el telefoto, una vez pasados los 5 aumentos ópticos dependen de la magia de Google con el post procesado de imagen para no perder nitidez y generar ruido.
En líneas generales, tanto para la cámara principal como la gran angular, la representación del color es muy correcta y se mantiene casi idéntica al pasar de una lente a otra. Las imágenes capturadas con el telefoto, una vez pasados los 5 aumentos ópticos dependen de la magia de Google con el post procesado de imagen para no perder nitidez y generar ruido.
No obstante, más allá de los -escasos- cambios en el hardware de las cámaras, el aspecto más importante sigue siendo el software y las herramientas que pone a disposición Google para mejorar las imágenes. La firma californiana hace uso de la IA para analizar cada foto a capturar y mezcla diferentes tomas para proporcionar el mejor resultado, de forma automática. No obstante, la mejora de las fotografías no acaba en el procesado de la imagen, ya que el usuario puede modificar diversos parámetros gracias a las funciones adicionales basadas en IA de Google, como modificar el aspecto del cielo o hacer uso del famoso Borrador Mágico para eliminar personas u objetos que no queramos incluir en la foto.
Una de las novedades más interesantes que se han añadido con el lanzamiento de la familia Pixel 9 es el modo ‘Inclúyeme’. Esta función tiene como objetivo facilitar las fotografías grupales cuando no se dispone de terceras personas o un trípode para realizar la fotografía. Haciendo uso de una combinación entre inteligencia artificial (IA) y realidad aumentada (AR), este modo requiere de la toma de una imagen en la que se deje espacio para el fotógrafo de la misma. Posteriormente este se ubicará en dicho espacio habiendo cedido el teléfono a uno de los integrantes de la foto original y se toma una nueva foto. El teléfono las combina para obtener una imagen con todos los integrantes. Este modo, además de curioso, produce resultados sorprendentemente buenos, aunque en ocasiones, dependiendo del encuadre, unas personas pueden salir más grandes que las otras.
Haciendo uso de una combinación entre inteligencia artificial (IA) y realidad aumentada (AR), este modo requiere de la toma de una imagen en la que se deje espacio para el fotógrafo de la misma.
El Pixel 9 Pro XL dispone de grabación de vídeo hasta 8K a 30 fps por segundo, con casi el mismo resultado que la fotografía, buena interpretación del color, enfoque rápido y estabilización muy correcta. No obstante, sigue un escalón por debajo del Iphone que es el rey en vídeo en smartphones. Hay un modo de optimización del zoom y estabilización por IA para los vídeos, pero requiere de tener activada la copia de seguridad de imágenes en Google Fotos y tarda mucho en procesar pese a que los clips sean de corta duración.
Nota: 9
Lo mejor: La experiencia Pixel con la integración de la IA
Lo peor: El rendimiento de alta intensidad no está a la altura de sus competidores flagship