La COVID-19 ha tenido un fuerte impacto en el consumo de contenido digital que se hizo durante el confinamiento, actualmente un alto porcentaje de la población consume más contenidos digitales que antes de la pandemia. Sin embargo, este aumento del consumo no afecta a todas las franjas de la población. El 36% de las personas con más de 75 años no ha consumido contenidos digitales nunca y el 20% solo excepcionalmente. Además, el nivel de estudios es un factor clave en este estudio ya que el 34,9% de la población con estudios primarios no ha consumido contenidos digitales.
Asimismo, el incremento en el uso de contenidos digitales se concentra en la franja de edad de 14 y 24 años que antes de la pandemia ya tenían un consumo bastante alto. El 60% afirma que incrementó el uso de servicios digitales durante el confinamiento y continúa consumiendo más ahora que antes.
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Existe un incremento en el consumo de contenidos formativos y educativos, que han pasado a consumir tres de cada cuatro personas
Paralelamente, en cuanto al tipo de contenido consumido, según el estudio hay un incremento del 59,5% de la población a un 80,3% de la población que consume películas, series, vídeos y documentales, y la música digital ha pasado del 58,1% de la población al 80,1%. Por otro lado, también existe un incremento en el consumo de contenidos formativos y educativos, que han pasado a consumir tres de cada cuatro personas convirtiéndose en uno de los tipos de contenidos más utilizados por las personas entre 16 y 74 años. Otros hábitos que también han experimentado un incremento han sido la comunicación con familiares y amigos por videoconferencias y los trámites con la administración por internet.
Por otro lado, si se analizan los resultados según el género, en casi todos los tipos de contenidos siempre es mayor la tasa de consumo por parte de los hombres que de las mujeres. También, hay contenidos como el de libros electrónicos o imágenes digitales donde la tasa de consumo es casi idéntica. Donde más se nota la diferencia entre hombres y mujeres es en el consumo de videojuegos.
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En otro lugar, cabe mencionar que también ha incrementado la frecuencia de consumo de los distintos tipos de contenido. A lo largo del confinamiento, incrementó un 65,8% el consumo de películas y series. Actualmente, ese incremento sobre todo se produce en el consumo de periódicos y revistas digitales. Y un 44,9% de quienes escuchan música por medios digitales también lo hace diariamente.
Por otro lado, el pago por el consumo de contenidos digitales ha aumentado, un 45,8% de las personas confirma haber pagado en los últimos doce meses por acceder al visionado de películas, vídeos y otros contenidos audiovisuales. Los menores de 35 años son los usuarios que menos pagan, y cuando lo hacen es para consumir películas, música, videojuegos y contenidos educativos. Por el contrario, los mayores de 35 años sobre todo pagan por libros electrónicos y periódicos y revistas digitales.
Actitudes hacia el uso y consumo de contenidos digitales
En otro orden, el estudio revela los riesgos que la población relaciona con este uso que son: el potencial aislamiento social, la amenaza para la intimidad o privacidad y la libre circulación de mensajes de desinformación. Un 62,5% cree que las ventajas que proporciona internet y las nuevas tecnologías superan estos posibles inconvenientes. Respecto a la capacidad que tienen los usuarios para realizar acciones de seguridad digital, según el estudio más de cuatro de cada diez personas saben realizar todas las acciones de autoprotección por las que se preguntó.
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Finalmente, las ventajas principales que aportan el teletrabajo y el estudio en remoto son: la gestión del tiempo, el ahorro de desplazamientos y una mejor adaptación de los horarios. Para el 40% de los encuestados impulsa la autonomía y responsabilidad de los estudiantes. Sin embargo, la falta de contacto social y la dificultad de mantener una comunicación fluida en el caso de los estudiantes son algunos de los principales inconvenientes.
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