Hasta la fecha, el sector mantenía una serie de condiciones de acceso a la red telefónica fija para los operadores alternativos a Telefónica. Ahora, sin embargo, se abre un periodo de seis meses para que se puedan adecuar los diferentes actores para la nueva era desregulada.
Este mercado ha experimentado una notable transformación en los últimos años ya que cada vez son más los hogares que optan por tarifas convergentes que incluyen telefonía fija, mientras que las líneas de voz fija que se venden por separado están cayendo mes a mes. A finales de 2023, las líneas de telefonía fija contratadas por separado no alcanzaban ni el 10% del total, lo que marca una clara tendencia hacia la integración de servicios.
En este sentido, el regulador señala como una cuestión clara los avances tecnológicos como el acceso a través de internet o servicios como NEBA local o NEBA fibra.
En materia de competencia, la CNMC reporta una caída en la cuota de meracdo de Telefónica entre 2017 y 2023 que ha caído desde el 47,08% hasta el 41,79%, reflejando así el entorno competitivo cada vez más equilibrado en el que los operadores alternativos ganan terreno.
Con esta desregulación, Telefónica ya no estará obligada a proporcionar acceso a sus redes a los operadores alternativos.