De acuerdo con la compañía S21sec, el propósito de los grupos de cibercrimen es el robo de datos de censos electorales o de información personal para obtener un beneficio económico. En cambio, los hacktivistas buscan dañar a organismos estatales y empresas encargadas de algunos procesos electorales a través de ciberataques, como la digitalización del recuento de votos.
Por otro lado, S21sec destaca la actividad de los grupos ATP, liderados principalmente desde Rusia, como una de las mayores ciberamenazas con capacidad para llevar a cabo herramientas de ataque e intrusión en infraestructuras críticas. Estos grupos han puesto los procesos electorales como uno de sus principales objetivos, y se prevé que en las elecciones generales del 23J puedan llevar a cabo ataques como el cifrado de archivos o la destrucción de información, entre otros.
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Ante esto, Sonia Fernández, responsable del equipo de Threat Intelligence de S21sec, ha dicho que “dado el panorama geopolítico actual, puede ser que ya se estén realizando acciones de escaneo de redes e intentos de intrusión, para apoyar labores de ciberespionaje por parte de agentes externos a entidades relacionadas con el proceso electoral en España, que pueden tener impacto en la información almacenada y en la propia jornada electoral”.
Una de las acciones emergentes en los procesos electorales son las campañas desinformativas o las operaciones de influencia en la población. Estas acciones, llevadas a cabo a través de grupos ATP, hacktivistas y actores y compañías nacionales que difunden información falsa a través de bots en redes sociales como Twitter, tienen como objetivo manipular la percepción de los ciudadanos sobre sus líderes y partidos políticos. Esto puede agravar situaciones de tensión y modificar los resultados electorales en beneficio de otros actores.
Además, una de las novedades que pueden amenazar las elecciones generales del 23 de julio es el uso de la Inteligencia Artificial (IA) a través del lanzamiento de campañas manipulativas de deep fakes, que basan en la creación automática de textos engañosos y noticias falsas de manera mucho más ágil gracias a esta tecnología, para cambiar la percepción de la sociedad e influir en su voto.
Finalmente, dada la existencia de amenazas que se han presentado en los últimos cinco años en los procesos electorales, las elecciones del 23 de julio representan un desafío importante en ciberseguridad. Por ello, S21sec destaca la importancia de contar con una estructura de seguridad sólida que evite la manipulación o el robo de datos durante el proceso electoral, y permita el desarrollo normal de la jornada del 23J.
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