07/08/2016@10:55:09
En la Deep Web, un internet fuera de foco al que no se accede por los medios convencionales se vende de todo, también cuentas robadas. “Estas páginas funcionan como tiendas online en las que los cibercriminales pueden registrarse, comprar datos comprometidos y pagar con Bitcoins. Una vez adquiridos, se revelan los detalles al usuario, permitiéndolo así que los utilice para cometer un fraude”, explica LogDog, una firma israelí, en un informe.