Huawei Estados Unidos

El gigante tecnológico Huawei ha anunciado que planea invertir más de 300 millones de dólares cada año para fondos de investigación para universidades.

El diario The Washington Post han acusado a la tecnológica china que Huawei ha ayudado en secreto al gobierno de Corea del Norte para construir y mantener su red de internet comercial inalámbrico.

Tras la finalización de la cumbre del G20, celebrada en Osaka, el presidente de los Estados Unidos, Donald Trump y el de la República Popular China, Xi Jinping, han decidido restablecer las relaciones comerciales entre los dos países, dar un respiro a la presión arancelaria y permitir que las empresas americanas puedan vender productos y componentes a la tecnológica Huawei. Fin de la particular ‘crisis TIC de los misiles’. Al menos de momento.

Donald Trump ha confirmado este sábado que las compañías norteamericanas podrán volver a suministrar material a Huawei.

La rama de investigación de Huawei Technologies con sede en Estados Unidos se ha separado de la matriz y pasará a denominarse Futurewei Technologies para que el veto de la Administración Trump no sea un escoño en su trabajo.

Huawei ha reclamado a la operadora estadounidense Verizon una deuda de 1.000 millones de dólares por licencias de más de 230 de sus patentes.

Huawei ha presentado una moción de juicio sumario y ha pedido al gobierno de Estados Unidos que detenga sus “acciones ilegales” contra la firma apoyándose en supuestas alegaciones de falta de ciberseguridad.

El consorcio internacional de la industria encargada en la fabricación de tarjetas de memoria SD y microSD, la SD Association, había eliminado a Huawei de la lista de compañías que pueden utilizar este tipo de tecnología

Donald Trump ha extendido en tres meses, hasta agosto, el plazo para que las empresas estadounidenses dejen de operar juntamente con Huawei.

Las decisiones del presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, aparte de alocadas y poco meditadas, parecen dirigirse en un único objetivo: acabar con el poderío de China, caiga quien caiga por el camino, pero no por el hecho de ser China, sino por el hecho de que Estados Unidos pierde poder internacionalmente (aunque gran parte de la culpa de esto la tengan las políticas internacionales de la propia Administración Trump).

La Administración Trump redobla sus esfuerzos para golpear a Huawei y al régimen chino en plena guerra comercial firmando una orden ejecutiva donde declara una emergencia nacional en el sector de las telecomunicaciones. Esta decisión puede bloquear negocios entre firmas y la propia Huawei.

Huawei ha crecido un 39% durante el primer trimestre del año, situándose en 27.000 millones de dólares a pesar de haber recibido acusaciones de espionaje en estos últimos meses.