La inteligencia artificial ha pasado de ser una tendencia emergente a convertirse en una presencia habitual en múltiples aspectos de la vida laboral. Más allá del aumento de productividad que prometen las herramientas como ChatGPT, están apareciendo nuevos agentes inteligentes capaces de tomar decisiones de forma autónoma y ejecutar tareas de principio a fin sin supervisión humana constante.
Según un estudio de Entelgy, más del 60% de los trabajadores en España valora positivamente el uso de estos agentes. El 60,2% afirma conocer su existencia y apreciar su utilidad, un dato que crece hasta el 73,3% en el caso de los jóvenes de entre 18 y 29 años.
La aceptación va en aumento: un 55,6% de los encuestados se muestra dispuesto a recibir ayuda de estos agentes en su vida cotidiana. En el entorno profesional, la actitud es aún más favorable: el 61,8% los ve como aliados que pueden facilitar sus tareas diarias.
Sin embargo, esta apertura también viene acompañada de cierta desconfianza. Aunque un 54,7% se sentiría cómodo interactuando con un agente de IA en contextos importantes como una consulta médica o una asesoría legal, un 37,7% solo lo haría si puede contrastar la información con una persona. Además, un 45,3% directamente no se sentiría seguro con este tipo de interacción.
Uno de los principales obstáculos para una adopción masiva sigue siendo la privacidad. Ocho de cada diez personas expresan preocupación por la posible recolección de datos personales, lo que refleja la necesidad urgente de establecer marcos éticos y normativos claros.
Mirando al futuro, la percepción es ambivalente: un 64,1% cree que los agentes de IA acabarán sustituyendo a los humanos en ciertas tareas, pero la mayoría considera que aún carecen de elementos esenciales como la empatía (72,9%) o la moralidad (70 %). Solo un 6,3% considera que ya están al mismo nivel que una persona.
Sí hay más consenso sobre los ámbitos en los que estos agentes pueden aportar valor. Los trabajadores destacan su utilidad en entretenimiento, atención al cliente, educación, salud, seguridad y finanzas.