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martes 09 de noviembre de 2021, 12:00h

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Es una realidad, el teletrabajo ha venido para quedarse. Y España es uno de los mejores destinos para sacarle partido al trabajo a distancia y atraer talento. Veamos algunos datos clave sobre la red de fibra, el clima en España y su impacto medioambiental, la legislación, los índices de felicidad, qué empresas ya han implantado este modelo de trabajo y por último, la situación actual del teletrabajo en España.

Red de fibra ejemplar

España es líder en fibra óptica en Europa. El rápido despliegue de la FTTP en España es de ejemplo para el desarrollo efectivo de las redes de fibra. Según un estudio de Analysis Mason, desde 2009, el país pasó del 0% al 85% de los locales pasados por FTTP en 2019, el segundo más alto de Europa después de Portugal.

Una infraestructura física preexistente clara, amplia y bastante moderna, como bocas de inspección, conductos y postes, que permitió a los operadores desplegar rápidamente la fibra a bajo coste. Este fue un factor clave que permitió a España adelantarse a otros países más ricos como el Reino Unido y Alemania.

“La pandemia ha cambiado muchas cosas, incluida la educación” y ha demostrado a las grandes y a las pequeñas compañías que “el teletrabajo funciona”

La competencia también ha demostrado ser beneficiosa para el despliegue de la FTTP en España. En 2015, Telefónica ya había pasado a 13,4 millones de hogares con su red FTTP. Orange España comprometió más de 1.500 millones de euros para la FTTP en 2015, y firmó un plan de compartición de red con Vodafone en 2014.

Por su parte, José María Álvarez-Pallete, presidente de Telefónica, ha destacado en su intervención en el encuentro internacional EnlightED que “la red de telecomunicaciones española nunca se pensó para que el 100% de la población estuviese en casa trabajando, estudiando y entreteniéndose y, sin embargo, funcionó” y es que “la pandemia ha cambiado muchas cosas, incluida la educación” y ha demostrado a las grandes y a las pequeñas compañías que “el teletrabajo funciona”.

Clima

Los beneficios del teletrabajo son múltiples: reducción de los desplazamientos, incremento de la productividad o mayor conciliación en casa. Otra de las grandes ventajas del teletrabajo en España es el clima. España es uno de los países más soleados de Europa, un paraíso para los que vivimos en este país y un poco la envidia de nuestros vecinos europeos. Por ello, no es de extrañar que España se plantee como la opción de algunos para asentarse y teletrabajar.

Tenerife es el destino ansiado por muchos gracias a la iniciativa de “Welcome Pass” pensada para trabajadores en remoto, emprendedores y nómadas digitales. La isla canaria ha adaptado espacios de coworking para los teletrabajadores y ofrece distintas opciones para que los trabajadores se sientan como en casa.

Además, gracias al teletrabajo, España podrá reducir hasta en 3,9 millones de toneladas el CO2e al año, lo que implica que, por cada teletrabajador, se ahorrarán unos 600Kg de CO2e, de acuerdo a los datos del estudio realizado por Carbon Trust que encargó el “Instituto Vodafone para la Sociedad y Comunicación”.

España podrá reducir hasta en 3,9 millones de toneladas el CO2e al año.

La mayor cantidad de emisiones evitadas fue a través de las oficinas, incluso mayor que las generadas por los desplazamientos de sus trabajadores. Es cierto que el teletrabajo aumenta el consumo de energía en los hogares, pero el efecto rebote no supuso un gran cambio.

En España, los 270kg de emisiones de carbono domésticas adicionales durante la pandemia se compensan con el ahorro de emisiones en oficinas (867kg) y las evitadas por los desplazamientos al trabajo (294 kg).

El teletrabajo ayudará a reducir hasta 3,9 millones de toneladas de CO2e al año en España

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Felicidad

Los españoles lideran el listado de felicidad de la Unión Europea, con siete puntos menos que en 2019, y son los segundos en optimismo, detrás de Finlandia, según una encuesta de Gallup Internacional de 2020.

De este modo, Madrid es la primera ciudad de Europa para teletrabajar, además en el ranking mundial se posiciona en segundo lugar como ciudad para trabajar en remoto, por detrás de Toronto, según el informe “Mejores ciudades para trabajar en remoto” de Remote.

Los españoles lideran el listado de felicidad de la Unión Europea.

Conforme a los datos del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS), apuntan que al 62,6% le gustaría continuar trabajando de manera remota, mientras que el 30,6% no comparte este planteamiento. El 75,7% de los encuestados cree que el teletrabajo es una buena forma de organizar y hacer su trabajo.

En cuanto a los efectos positivos que tiene el teletrabajo en la productividad son una mejor concentración por menores ruidos e interrupciones, mayor autonomía en la organización del teletrabajo y mayor motivación por la autonomía y la flexibilidad horaria y geográfica.

Madrid es la ciudad europea que mejor se ha adaptado al teletrabajo

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Empresas que apuestan por el teletrabajo

Empresas de todos los tamaños están seguras de que mantendrán niveles de teletrabajo ligeramente superiores a la situación anterior a la pandemia, mientras que en el caso de las Administraciones Públicas prevén un incremento notable respecto a la situación previa, alcanzando el teletrabajo al 55% de los trabajadores frente al 18% antes de la crisis.

Las empresas ponen de relieve que la digitalización ha permitido mejorar la relación con sus clientes y han facilitado su continuidad en un contexto de distanciamiento social, gracias al marketing digital, el comercio electrónico y las aplicaciones de pago, que les han ayudado a generar ingresos y a asegurar su sostenibilidad económica.

Telefónica se decanta por el teletrabajo y smart work para 15.000 profesionales. La compañía confirma que una vez finalicen todas las medidas excepcionales con motivo de la pandemia, los empleados de la compañía tendrán la opción de teletrabajar dos días a la semana siempre que su actividad lo permita.

Las empresas ponen de relieve que la digitalización ha permitido mejorar la relación con sus clientes.

Microsoft da un paso más allá en la oferta del teletrabajo con Microsoft Viva, la que ha denominado como “la primera Plataforma de Experiencia del Empleado”. Viva auna una solución con cuatro módulos: Viva Connections, Viva Insights, Viva Learning y Viva Topics.

El CEO de Microsoft, Satya Nadella ha asegurado que “si hay algo que nos ha demostrado el último año es la necesidad de unificar la tecnología, los datos y la información de valor -el conocimiento que se extrae de ellos-, para crear entornos de trabajo sostenibles e innovadores, y para restaurar el capital social que se ha perdido con el cambio a entornos de trabajo híbridos”.

Legislación

La Ley de Teletrabajo española entró en vigor el 11 de julio de 2021. Algunos de sus datos más destacados es que el teletrabajo será voluntario, reversible y que la empresa tendrá que asumir los gastos asociados, pero se respetan los derechos laborales y deberes, independientemente de si se está teletrabajo o se trabaja de modo presencial.

La regulación se aplicará cuando el 30% de la jornada (dos días a la semana o el porcentaje proporcional equivalente en función de la duración del contrato) se trabaje en remoto en un periodo de tres meses.

Igualmente se establece que el teletrabajo será voluntario, tanto para el trabajador como para la empresa, es decir, que no se puede imponer y requerirá la firma de un acuerdo por escrito que puede ser parte del contrato inicial o incorporarse a posteriori.

El teletrabajo será voluntario, reversible y que la empresa tendrá que asumir los gastos asociados.

Las empresas tendrán que entregar a los empleados copias de todos los acuerdos que se realicen y de sus actualizaciones en un plazo máximo de 10 días y, posteriormente, se enviará una copia a la oficina de empleo.

La norma establece que la empresa es la que tendrá que encargarse de la dotación y del mantenimiento de los medios y de los equipos que necesite el trabajador para llevar a cabo su actividad a distancia, en los términos establecidos en la negociación colectiva o en el acuerdo firmado con la empresa.

El texto apunta además que el “desarrollo” de la actividad tendrá que ser sufragado o compensado por la empresa, ya que el trabajador no puede asumir los gastos relacionados con los equipos y el resto de medios que le hacen falta para llevar a cabo su actividad.

Las claves de la nueva ley del teletrabajo

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Situación actual del teletrabajo en España

Según el estudio “Teletrabajo en España en el segundo trimestre de 2021” de ONTSI, el confinamiento estricto decretado como consecuencia de la COVID-19 en el segundo trimestre de 2020 multiplicó por tres el porcentaje de personas que teletrabajaban habitualmente, pasando del 4,8% de los ocupados en 2019 (951.800 personas) al 16,2% en el segundo trimestre de 2020 (3.015.200 personas).

Por otra parte, el teletrabajo ocasional (teletrabajar menos de la mitad de los días que se trabaja) se ha ido incrementando durante la pandemia y se está estabilizando en torno al 5,3% de los ocupados (1.051.400 personas) desde un 2,9% (539.000 personas) en el segundo trimestre de 2020.

Respecto a la brecha de género, la adopción del teletrabajo es superior entre las mujeres que entre los hombres. En el segundo trimestre de 2021 el 10% de las mujeres teletrabajaron habitualmente frente al 8,9% de los hombres.

La comunidad autónoma con mayor proporción de personas teletrabajando habitualmente es Madrid, duplicando la media nacional

Por edades, en todos los grupos de edad se constata una reducción de la adopción del teletrabajo en el segundo trimestre de 2021 respecto del trimestre anterior. Los grupos de personas que más teletrabajan desde el domicilio particular son las de 35 a 44 años (10,3%), seguidos de las de 25 a 34 años (9,9%).

Analizando por comunidades autónomas, el teletrabajo habitual baja en el segundo trimestre de 2021 respecto del trimestre anterior en todas ellas, excepto en Aragón y Melilla en las que crece 0,2 y 0,8 puntos porcentuales respectivamente. La comunidad autónoma con mayor proporción de personas teletrabajando habitualmente es Madrid, con el 18,7% lo que duplica la media nacional. Le sigue Cataluña con un 11,1% y Asturias con un 8,7%. Las comunidades en las que el teletrabajo es menos habitual son Extremadura (4,3%), Cantabria (5,3%) y Navarra (5%).

Como conclusión se puede afirmar que la adopción del teletrabajo habitual en España muestra signos de estabilización en el segundo trimestre de 2021 en torno al 9-10%, valores que doblan el nivel previo a la COVID-19 (4,8%).

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