Esta nueva regulación es la base con la que el Gobierno que lidera Pedro Sánchez busca posicionar a España a la vanguardia de Europa en el desarrollo de “un ecosistema emprendedor con vocación innovadora”, así como en la creación y relocalización de empresas emergentes y en la atracción de talento y capital.
En diciembre de 2018, el Gobierno abría por primera vez a consulta pública la Ley de Startups y cuatro años después el Congreso de los Diputados daba el visto bueno a la legislación, que se suma a las legislaciones de la Ley Crea y Crece y la Ley Concursal, también aprobadas este año para mejorar el clima empresarial en nuestro país.
La entrada en vigor de esta legislación supone un importante paso hacia delante de España, necesitada de una figura regulatoria que favoreciera la creación de estas compañías innovadoras y la atracción y retención del talento en nuestro país.
Durante los cuatro años desde que se anunciase la ley hasta su aprobación, el volumen de inversión media por operación de startups se ha triplicado prácticamente. Además, Barcelona y Madrid se han situado como tercera y décima ciudad a nivel europeo en cuanto a emprendimiento, según el ranking Startup Heatmap.
Ahora, esta nueva regulación permitirá potenciar la atracción de inversores con beneficios fiscales, mercantiles y laborales dirigidos a las startups, sus inversores, emprendedores y empleados. Además, se trata de la primera regulación de Europa para el apoyo específico al ecosistema emprendedor.
"Es una nueva ley que pone a España a la vanguardia en el impulso de este ecosistema”
“La Ley de Startups nace para dar una mayor cobertura legal y respaldo económico a las empresas emergentes de base tecnológica para ayudar a construir un ecosistema empresarial capaz de convertirse en el motor de la modernización de la economía”, señala Pol Gomà, fundador y CEO de Capboard, plataforma diseñada para gestionar equity, inversores y planes de incentivos en Europa. “En definitiva, es una nueva ley que pone a España a la vanguardia en el impulso de este ecosistema”, asegura Gomà.
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100 millones para proyectos tecnológicos
El Gobierno de España ha aprobado además un plan de 100 millones de euros para acompañar a proyectos tecnológicos como parte de la Ley de Startups. Se trata de un paquete de licitaciones y programas que se financiarán mediante los fondos Next Generation europeos y permitirán impulsar el ecosistema emprendedor tecnológico durante el próximo año.
Para ello, se desplegarán casi una treintena de aceleradoras de startups financiadas con fondos públicos y varios programas para impulsar startups en diversos campos con el objetivo de llegar a 6.800 empresas.
A ello se suma que la Escuela de Organización Industrial (EOI) está en plena licitación de una red de aceleradoras públicas que cubrirán el ámbito regional y diferente sectores, para lo que se adjudicarán algo más de 33 millones de euros.
Estas medidas se suman a otras no específicas del sector, como los 'Digital Hub' anunciados por Industria o las ayudas a las pymes para su crecimiento, que se unirán a otros programas lanzados este año como la Línea de Emprendedoras Digitales que financiará proyectos encabezados por mujeres con 50 millones de euros (18 millones en 2023) y las inversiones en fondos para crear scaleups españolas que movilizarán unos 4.000 millones de euros de inversión pública-privada.
Aplaudida por el sector
A pesar de que el Gobierno y Congreso no han respondido a todas las peticiones del sector, la sensación mayoritaria es de alegría. En un comunicado conjunto la Asociación Española de Startups (AES), la Asociación Española de la Economía Digital (Adigital), Spaincap, Endeavor, la Fundación Cotec, Startup Valencia, South Summit, Tech Barcelona y la Asociación Española de Bioempresas (AseBio) han celebrado la aprobación de la Ley de Startups.
“Era necesario reconocer la singularidad de la startup como modelo empresarial de innovación, y, por tanto, definirla”
“Llevamos varios años trabajando para resaltar la importancia de disponer de un instrumento jurídico en forma de ley que describiera y pusiera en valor el conjunto del ecosistema de emprendimiento y de innovación”, señalan en un texto conjunto. “Era necesario reconocer la singularidad de la startup como modelo empresarial de innovación, y, por tanto, definirla. También, establecer un mecanismo ágil de acreditación para las compañías, del que finalmente se encargará ENISA, que diera automáticamente acceso a una serie de ventajas y de medidas en materia fiscal, laboral, económica y social”, apuntan.
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Baja la financiación
Uno de los principales retos de las startups es la capacidad de lograr financiación para desarrollar sus proyectos. En concreto, en junio de 2022 los niveles de inversión en el sector tecnológico europeo eran un 4% más altos que un año antes, pero en el segundo semestre la inversión ha caído por la situación macroeconómica y geopolítica, por lo que se espera que creemos el año con una inversión total para el sector de unos 85.000 millones de dólares, lejos de la alcanzada un año antes en el que se logró el máximo histórico con más de 100.000 millones de dólares. Aun así, es más del doble que en 2020, cuando se alcanzó los 38.800 millones.
Si nos fijamos en la tasa de inversión en el sector tecnológico de startups en España, las cifras son aún pequeñas en relación con el volumen de población: solo el 7% de la financiación del total de startups europeas, según se extrae del informe State of European Tech 2022, el estudio anual de Atomico.
Pese a ello, el sentimiento es optimista ya que el 59% de los encuestados considera que la tecnología ofrece oportunidades de inversión más atractivas y el 77% confía en el futuro de la tecnología europea para el próximo año.
“El verdadero éxito del sector se basa en el talento, la innovación y la creación de empresas a largo plazo”
Durante este 2022 han surgido 31 unicornios nuevos en Europa, datos positivos pero muy lejos de los 105 que surgieron en 2021. “El ecosistema tecnológico tal como lo conocemos tiene apenas 20 años y en ese tiempo ha madurado a un ritmo increíble. El verdadero éxito del sector se basa en el talento, la innovación y la creación de empresas a largo plazo”, señala Tom Wehmeier, socio director de Insights en Atomico y coautor del informe. “Las piezas clave de este rompecabezas siguen en su lugar, con 44.000 millones de dólares en fondos de capital de riesgo europeos listos para invertir en las oportunidades adecuadas. En cuanto a la fuerza subyacente de nuestro ecosistema, ha cambiado mucho menos de lo que pensamos”, apunta Wehmeier.
Hay varias firmas españolas que han logrado cerrar importantes rondas de financiación a lo largo del año, como Seedtag que consiguió la mayor ronda de nuestro país en lo que va de año con 250 millones de euros del fondo de capital riesgo Advent International; la tercera mayor ronda la protagoniza Paack que conseguía una Serie D de 200 millones de euros liderada por SoftBank Vision Fund 2; también Fever conseguía una ronda de 200 de euros, dando el salto para convertirse en un nuevo unicornio español, cosa que también ha logrado Travelperk.
Son muchos los retos que tiene por delante nuestro país aún para colocarse a la cabeza de la innovación y el emprendimiento en Europa, lo que permitiría una mayor creación de grandes empresas como lo son las españolas Cabify, Glovo, eDreams, Idealista, Devo, Jobandtalent, Travelperk, Wallbox y Flywire, entre otras. Mientras tanto, desde el Gobierno se confía en las ayudas y en la nueva regulación.
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