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Por Pilar Bernat
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pbernattelycom4com /7/7/16
sábado 30 de julio de 2016, 10:00h

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Si alguien pensó alguna vez que el defecto de los terminales de gama alta de Huawei era no tener suficiente diseño, se han quedado sin argumentos. La salida al mercado del P9 y de la versión de 5,5”, el P9 Plus, ha demostrado que la multinacional china no sólo sabe implementar la mejor tecnología a buen precio, sino ahora también dar con la clave de ‘lo que gusta’

Huawei P9
Huawei P9
Convivir con un Huawei P9 se ha convertido en toda una experiencia; en primer lugar, porque todo aquel que lo ve encima de una mesa lo mira con curiosidad y se sorprende al darle la vuelta. Sin aristas con materiales nobles, estéticamente reconocible y, con líneas puras que definen la marca y la gama con claridad. El tacto es suave y sólo el pulsador de activación texturizado y el de volumen sobresalen en el marco.

Pantalla resistente y fluida

Tanto el P9, como el P9 plus, van recubiertos con cristal Gorilla Glass 4 del fabricante americano Corning; el cual lleva años demostrando que es capaz de desarrollar un material que cada vez aporta más resistencia a los móviles. De hecho, tener la oportunidad de ver las demostraciones que realizan es bastante espectacular puesto que ‘maltratan’ el cristal con materiales como cemento, hierro, etc. para demostrar la efectividad de su producto. No en vano son nЬmero uno del mundo a este respecto.
Bajo el cristal encontramos una primera diferencia. El P9 lleva tecnología de pantalla IPS-NEO LCD en 5.2 pulgadas de diagonal, con un ratio de pantalla de 72.9% y el Plus es Super AMOLED (LEDs de matriz activa), tiene 5.5 pulgadas y el ratio es de 72.7%. Por lo demás, la resolución es idéntica, 1080 x 1920 píxeles y si en el primer caso la densidad de píxel es el 423 ppp, en el segundo baja a 401 ppp . Todas las pruebas realizadas al diplay han sido más que correctas, el toque de diez dedos y el nivel de sensibilidad y fluidez son casi perfectos. Llama especialmente la atención, en el caso del P9, el contraste la luminosidad y la pureza de los blancos, que en otras tecnologías tiende a verdear. Podemos decir con seguridad que es una de las mejores que hemos visto.

El P9 lleva tecnología de pantalla IPS-NEO LCD en 5.2 pulgadas de diagonal, con un ratio de pantalla de 72.9% y el Plus es Super AMOLED, tiene 5.5 pulgadas y el ratio es de 72.7%


A ojos menos técnicos, simplemente llama la atención la imagen brillante que parece ser, en ocasiones, una pegatina; un efecto que se produce al no haber prácticamente aire entre el cristal y la placa y que aporta sensación de relieve.
La interfaz del usuario, en ambos casos, es Emotion UI 4.1, y hay que reconocer que se ha occidentalizado muchísimo si la comparamos con las primeras versiones. Eso sí, mantiene el encuadre de los iconos en marcos de esquinas redondeadas en los cuales embebe los logos de las aplicaciones; de forma que el aspecto es de orden y harmonía pero no gusta a todo el mundo.
Si pellizcamos la pantalla, el sistema nos permite personalizar el fondo, los widgets, las transiciones entre páginas y otras curiosidades como el número de iconos que queremos aparezca en cada vista, si nos gusta que se alineen automáticamente cuando eliminamos una aplicación o si preferimos agitar el terminal para hacerlo. Cabe también decidir si queremos que en el propio icono se nos anuncie si tenemos alguna actualizaciЧón o notificación o bien, en qué aplicaciones sí y en cuáles no.

Agilidad extrema

Como ya hemos indicado antes, la respuesta al toque es instantánea y la agilidad del sistema operativo llamativa. El factor determinante a este respecto es la integración de un procesador Highsilicon Kirin 955, la joya de la corona de Huawei; que como todo el mundo sabe, es un fabricante que no sólo elabora terminales sino semiconductores e infraestructuras; por eso utiliza sus propias implementaciones para dar vida a sus productos.
En este punto conviene señalar que en las tablas comparativas de procesadores 2016, resultantes de los test de resistencia y desarrollo, el Qualcomm Sanpdragon 820 está inalcanzable; pero el Exynonos 8890, el Apple A9 y este Huawei Kirin 955 van a la zaga. Eso sí, en términos de temperatura, nos da la sensación de que es el mejor de todos, aun habiendo incluido Samsung un sistema de refrigeración adicional para que el usuario no tenga la sensación de calor extremo que se tenía, en determinados momentos, con en el Galaxy S6.
Donde parece estar menos fuerte este Huawei es en capacidades gráficas para jugar, pero consideramos que tampoco es un terminal concebido con este propósito.

Huawei P9 Plus

En el cenit de la imagen

Sin embargo, si de algo no hay duda, es de que Huawei ha centrado su esfuerzo en ofrecer a sus clientes lo mejor de lo mejor en experiencia de imagen. Su apuesta por la fotografía ya era pública y notoria y, en este caso, tanto en el P9 como en el P9+, equipados con idéntico equipo, se coronan.
Sobre el papel: una cámara principal dual de 12 Mpx, con lente de 27 mm y distancia focal f/2.2, autofocus, con flash de LED de doble tono y tamaño de pixel de 1.25 um. La frontal aporta 8 Mpx, 1080 p y f/2.4. Graba video en 1080p@60fps (el plus 1080@30 fps). El nombre y el hecho diferencial lo pone la óptica alemana de Leica.
¿Y qué nos aporta? Pues una vez abierta la cámara, basta con arrastrar el dedo a derecha e izquierda para saberlo. Así, entre los modos encontramos la foto automática, en la cual podemos elegir tomas con poca profundidad de campo (personas u objetos) y numerosos filtros, además de activar el flash en modo disparo o continuo. Si arrastramos hacia arriba una pequeña barra blanca situada en la base de la imagen, se activa el modo profesional y, con él, nuestro mejor o peor hacer en temas fotográficos; ya que podemos regular todos los parámetros habituales en la fotografía semiprofesional.

Huawei P9 Plus


Otra opción es ‘monocromático’ para tomas en blanco y negro; una especialidad de la casa gracias a la óptica Leica que merece la pena probar. ‘Belleza’ para restar arrugas, manchas e incluso estilizar (si las modelos pueden, por qué nosotros no); esta característica la podemos aplicar a las fotos de la cámara principal, a la frontal e incluso al video.
Por supuesto lleva HDR para matizar la imagen cuando las condiciones de luz no sean muy buenas; toma panorámica, cámara lenta, cámara rápida, toma nocturna, fotos y video con marca de agua (datos de posicionamiento añadidos a la imagen); además de algo que Huawei popularizó con el P8 y nos permite dar espectacularidad a las fotografías: la pintura con luz.
A la hora de pintar con luz podemos elegir entre estela (como las que dejan los coches en movimiento), Grafiti (capta la luz en movimiento por la noche o en entornos oscuros), Aguas suaves (para los flujos de agua en movimiento), y Estrellas (para capturar el cielo en su plenitud).
Por supuesto podemos realizar ajustes para definir la resolución, el modo de la película, la localización GPS, el esquema guía (cuadrícula, cuadrícula phi, espiral de Fibonacci), activar el silencio, el temporizador, controlar el audio, definir la función de la tecla de volumen o elegir el nivel de saturación, contraste y brillo antes del disparo.
Como curiosidad, señalar que una vez enfocada la imagen, el pulsador trasero, que lleva incorporado el lector de huella digital, nos sirve, igualmente, como disparador.
En definitiva, el resultado de las pruebas técnicas es bueno y la experiencia de usuario mejor. Determinante a la hora de la compra es el diseño y la relación calidad/precio.
¿Qué más nos gusta? Su aplicación de salud, que dice que hoy no hemos quemado aún las calorías suficientes, así es que dejamos el teclado, activamos el programa del smartphone y… ¡A correr!

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