Durante el primer semestre fiscal del año (abril-septiembre), Vodafone España facturó 1.929 millones de euros, un 1,8% menos que el año anterior. A su vez, el EBITDA se desploma un 11,6%, hasta los 394 millones de euros y el margen de EBITDA se reduce en 2,3 puntos porcentuales.
Mientras tanto, registró unos ingresos por servicio que caen un 2,7%, hasta los 1.731 millones, lo que a su vez implica una mejora respecto a caídas anteriores, pero sitúa a nuestro país como el único, junto a Italia, que no crece en este periodo, debido, según la teleco, a la competencia y la tendencia al low cost.
Una de cal y otra de arena en el apartado comercial
El rédito comercial del trimestre llega con buenas, pero también malas noticias. A nivel global, la teleco mejora su cifra de clientes ya que suma 78.000 clientes de móvil hasta los 13,9 millones y 19.000 clientes low cost de Lowi. Sin embargo, pierde 20.000 clientes de banda ancha y 16.000 de televisión.
Asimismo, en este trimestre Vodafone ha cerrado el 15% de las tiendas minoristas y no se han renovado varios de los contratos de distribuidores.
Por otro lado, el negocio de Vodafone Business ha reducido su facturació un 2% en el semestre y un 1,2% en el trimestre por perder algunos contratos de conectividad en el segmento de pymes y autónomos, que se ha compensado en parte por el crecimiento de los servicios digitales.
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