El regulador de competencia europeo ha impuesto una multa por abuso de posición dominante en el sector de los chips de 3G para conectar smartphones y tabletas a redes móviles, acusándole de práctica de precios predatoria entre 2009 y 2011, al vender sus chips 3G a Huawei y ZTE por debajo de su precio de coste, con el objetivo final de eliminar del mercado a Icera, lo cual es ilegal según la normativa antimonopolio de la Unión Europea.
“Los chipsets de banda son componentes clave para que los dispositivos móviles puedan conectarse a Internet y Qualcomm vendió estos productos a un precio inferior al coste para clientes clave con la intención de eliminar a un competido”, ha informado la comisaria europea de Competencia, Margrethe Vestager. “Este comportamiento estratégico de Qualcomm impidió la competencia y la innovación en este mercado y limitó las opciones disponibles para los consumidores en un sector con una gran demanda y potencial para tecnologías innovadoras”, ha sancionado Vestager.
Ante esto y teniendo en cuenta que estas prácticas son “ilegales según las normas antimonopolio de la UE, hemos multado a Qualcomm con 242 millones de euros”.
"Este comportamiento estratégico de Qualcomm impidió la competencia y la innovación en este mercado y limitó las opciones disponibles para los consumidores"
La posición dominante en un mercado no es algo ilegal en la Unión Europea, pero las compañías que se encuentran en esta situación tienen unas responsabilidades especiales de no abusar de su poder en el mercado y de no restringir a la competencia.
Hay que recordar que Icera era un competidor viable por aquel entonces, pero que en mayor de 2011 fue adquirida por Nvidia que decidió en 2015 cerrar la línea de negocio de chips de banda base.
La sanción de 242.042.000 euros tiene en cuenta tanto la duración como la gravedad de la infracción y representa el 1,27% de la facturación de Qualcomm en 2018 y busca “disuadir a los actores del mercado de participar en tales prácticas anticompetitivas en el futuro”.