Linda Yaccarino ha dejado su puesto como consejera delegada de X tras dos años al frente de la red social de Elon Musk, en plena transición hacia una plataforma dominada por la inteligencia artificial.
El anuncio, realizado este miércoles a través de un mensaje publicado en la propia red social, marca el final de una etapa compleja dentro de la empresa liderada por Elon Musk, en la que la transformación del modelo de negocio y la expansión hacia la inteligencia artificial han estado en el centro de la estrategia corporativa.
El nombramiento de Yaccarino en mayo de 2023 se interpretó entonces como un intento de Musk por estabilizar la estructura operativa de la plataforma tras su adquisición de Twitter por 44.000 millones de dólares en 2022. Con una trayectoria consolidada como ejecutiva publicitaria, su misión principal era recuperar la confianza de los anunciantes, mantener la rentabilidad y profesionalizar la gestión diaria de una empresa sometida a una presión constante tanto a nivel técnico como reputacional.
Un mandato marcado por la reestructuración de X
Yaccarino ha agradecido a Musk la oportunidad de liderar una "transformación histórica"
En su mensaje de despedida, Yaccarino ha agradecido a Musk la oportunidad de liderar una "transformación histórica" y se ha mostrado orgullosa de los logros alcanzados durante su mandato. Entre ellos ha destacado la puesta en marcha de funciones como Community Notes, el sistema colaborativo para combatir la desinformación, así como la iniciativa X Money, aún en desarrollo, con la que se pretende introducir servicios financieros en la plataforma para reforzar su vocación como "app para todo".
La ejecutiva también ha subrayado la relevancia del trabajo inicial para “priorizar la seguridad de los usuarios, especialmente de los menores, y restaurar la confianza de los anunciantes”. Una tarea fundamental si se tiene en cuenta que muchos anunciantes abandonaron la plataforma tras la toma de control por parte de Musk, preocupados por la relajación en las políticas de moderación de contenidos y la inestabilidad en el discurso público que afectaba al entorno comercial.
Un cambio de ciclo vinculado al crecimiento de xAI
La renuncia de Yaccarino se produce un día después de que Grok —el chatbot desarrollado por xAI, la compañía de inteligencia artificial también propiedad de Musk— se viera envuelto en una nueva controversia por la publicación de mensajes de carácter antisemita, lo que ha generado una fuerte reacción pública. Aunque la ejecutiva no menciona ningún motivo específico para su salida, la coincidencia temporal ha alimentado las especulaciones sobre una posible pérdida de control en la narrativa corporativa de X.
Yaccarino hace referencia a una “nueva etapa” que comienza con la integración de X y xAI, en la que la inteligencia artificial pasará a tener un papel aún más relevante
En su despedida, Yaccarino hace referencia a una “nueva etapa” que comienza con la integración de X y xAI, en la que la inteligencia artificial pasará a tener un papel aún más relevante en el desarrollo del producto. La compañía busca consolidarse como una “plaza pública digital” con funciones ampliadas que incluyan desde servicios financieros hasta herramientas de creación automatizada de contenido, todo ello con la IA como eje tecnológico.
Con la salida de Yaccarino, Musk recupera el control directo de una plataforma que continúa en plena transición técnica y de modelo de negocio, en un entorno en el que las tensiones entre libertad de expresión, regulación digital y sostenibilidad comercial se mantienen en primer plano.
Foto: Depostiphotos