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Entre el 10 a Microsoft, el escándalo en la industria y el movimiento HeForShe

Entre el 10 a Microsoft, el escándalo en la industria y el movimiento HeForShe

Por Pilar Bernat
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pbernattelycom4com /7/7/16
sábado 09 de abril de 2016, 11:45h

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No soy persona que suela abanderar el feminismo; de hecho, tengo mis reticencias a este tipo de movimientos generales muchas veces mal entendidos; pero el pasado 8 de marzo, día de la mujer trabajadora, Microsoft lanzó una campaña con un video, en el cual se preguntaba a niños y niñas, en diversas partes del mundo, a cuantas mujeres ‘inventoras’ conocían… Y no fue la no respuesta la que me impresionó, sólo conocían hombres, sino mi propio pensamiento: “Ada Lovelace, porque se ha puesto de moda con el último libro de Isaacson; Radia Peltman, porque la conozco personalmente; por supuesto Madam Curie y…”

Y entonces pensé en Microsoft y en Pilar López, al frente de la compañía en España; en Helena Herrero (HP), en Marta Martínez (IBM), Sarah Harmon (LinkedIn) y qué poquito más. Si bajamos un poco de nivel encontramos grandes directoras de marketing y/o comunicación -ahí tenemos a Marisa Navas en Telefónica, a Beatriz Valverde en Orange, a Araceli de la Fuente en LG, A Jia Wei en ZTE, Maria Luisa Melo en Huawei, Sandra López en Sony, etc. - pero no hay una larga lista de la que poder presumir.

Sin embargo, lo que más apuro da es pensar en grandes fabricantes, como Apple o Samsung (la primera con una plantilla muy reducida y la segunda muy amplia), pretendidamente ejemplo de todo, en las que no cabe si quiera calcular un tanto por ciento medianamente aceptable de representación femenina en sus mandos locales. Item más, nadie se extraña.

Pero para qué escandalizarnos por la ausencia de cargos si sólo pensar en el día a día o en la historia reciente del sector telco nos sonroja. Triste es la broma de la que yo misma me hago eco con frecuencia que recuerda que en el único sitio donde no hay cola en los baños de mujeres es en las ferias de tecnología; no por el hecho, que resulta cómodo y gracioso, sino por lo que implica. Peor es que en el turno de preguntas de una rueda de prensa -como ocurrió el pasado día 15 de marzo- algún presunto compañero tome la palabra para hacer el típico chiste machista de pésimo gusto y poco respeto para las tres o cuatro mujeres que estábamos presentes o, mucho peor, para las ausentes (entre ellas su mujer, a quien catalogó de tonta especificamente).

Aunque lo que a veces me subleva son los ‘secretos’ a voces, como el ascenso imparable de alguna compañía y de sus correspondientes directivos quienes, no teniendo suficiente con sus fantásticos productos, han utilizado costumbres tan ¿deleznables? como la invitación a los más altos ejecutivos/clientes al extremo oriente para, inmejorablemente instalados, llevarlos a disfrutar de las ‘prived singers’ en karaokes de micrófono ambiguo; las no pocas presentaciones en que ante nosotros, los periodistas, se han abierto reservados con azafatas ligeras de ropa ‘prestando puntual servicio’ o la curiosa costumbre de que a los ejecutivos se les imponga entre sus deberes ‘horarios sin horas’. ¿Cómo van a contratar mujeres?

Dicen los especialistas con respecto al MWC de Barcelona que “durante la celebración de convenciones de este tipo, el consumo de sexo pagado es, básicamente, un ritual social”; de hecho, se calcula el aumento del negocio en la Ciudad Condal, durante esos días, en un 50%. Y a tal punto ha llegado el rumor, que la organización pidió este 2016, a una conocida casa de citas local, que retirara el cartel anunciador que mantiene durante todo el año en las inmediaciones del recinto ferial. La empresa accedió sin problemas no sin antes declarar en los medios “Muchos de los congresistas ya nos conocen y vienen cada año atraídos por la calidad de nuestros servicios y nuestro precio competitivo. No creo que dejen de venir por quitar una valla publicitaria”.

La Organización de Naciones Unidas ha creado recientemente un movimiento en pro de la igualdad de género y el empoderamiento de las mujeres; su nombre HeForShe y, entre otras empresas, cuenta con el apoyo de la tecnológica Vodafone en el mundo entero.

Después de lo vivido en las últimas semanas, consideramos que es la hora de prestar nuestro apoyo incondicional a este tipo de movimientos. Igual un primer paso es esta pequeña denuncia, igual el próximo debe ser centrar el foco; pero, más allá de escandalizarnos, lo propio es sumar apoyos, trabajar en las universidades, volver la espalda a quienes nos ofenden y procurar un día a día en que brillen las mujeres.

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