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miércoles 26 de octubre de 2022, 09:00h

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El hermano mediano de la nueva hornada de terminales de Motorola puede ser, sin lugar a dudas, el más interesante. Esto se debe a su gran relación calidad precio, estamos ante un gama media-alta que cuesta menos de 600 euros y puede competir de tu a tu con terminales de precios mucho más elevados.

Diseño

El Motorola Edge 30 Fusion es un dispositivo elegante y bien construido. Sus materiales le confieren un aspecto premium, que se corresponde con dispositivos de precios más elevados. La trasera, fabricada en cristal, tiene una textura mate de aspecto micro granulado que favorece al agarre del equipo. El dispositivo cuenta con un grosor de únicamente 7 milímetros y medio. Esto se debe sumar a su reducido peso, que no supera los 178 gramos. La curvatura de la pantalla, unida a la de la parte trasera también hacen su parte en cuanto a la comodidad de uso del equipo, y además le confieren un vistoso perfil fino.

El 30 Fusion está disponible en tres colores, ‘Aurora White’, un elegante blanco perlado, ‘Cosmic Grey’, un gris muy oscuro, más discreto; y ‘Vegan Leather’. Esta última versión, de cuero vegano, es una opción muy interesante para aquellos usuarios que quieran una textura diferente en su smartphone y estén saturados de aluminio o cristal.

El Edge 30 Fusion está disponible en tres colores, ‘Aurora White’, un elegante blanco perlado, ‘Cosmic Grey’ un gris muy oscuro, más discreto; y ‘Vegan Leather’, para los que buscan nuevos acabados en sus dispositivos

En lo relativo a su tamaño, sin duda no nos encontramos ante un móvil especialmente compacto. Por otro lado, está lejos de los equipos más voluminosos. Se encuentra exactamente en el punto dulce entre tener una buena pantalla, con la que disfrutar de contenido multimedia, pero entrando en la mayoría de bolsillos o bolsos pequeños con facilidad.

Uno de los elementos que más llama la atención de su elegante diseño es el módulo de cámaras, que sobresale ligeramente en la esquina inferior izquierda de la trasera. Tiene una forma rectangular, redondeando suavemente los bordes. Está acabado con un toque bicolor, parte negro mate, parte negro brillante, que le confiere un aspecto muy interesante. Cada tono alberga una lente, y el brillante además el flash led.

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Pantalla

Motorola lo está haciendo espectacular con las pantallas de sus últimos móviles. Si ya la del Edge 30 Neo, un dispositivo de gama media, era un motivo claro de compra, en este 30 Fusion se lleva a otro nivel con un panel de espectacular calidad para su precio.

Se trata de una pantalla de 6,55 pulgadas, un tamaño intermedio perfecto. Cuenta con tecnología pOLED y una resolución FullHD+ (2400x1080) que le proporciona una densidad de 402 píxeles por pulgada. Incluye HDR10+ para la mejor calidad al visualizar contenido multimedia, y una espectacular tasa de refresco de 144Hz, tasa por la que Motorola lleva apostando desde el Edge 20, una de las mayores del mercado, por la mitad de precio que gran parte de la competencia. El equipo ofrece además una amplia variedad de configuraciones para la tasa de refresco. Por un lado, se puede fijar a 144Hz todo el tiempo, o únicamente a 60Hz con la consecuente pérdida de fluidez, pero ganancia en autonomía. El tercer modo es quizás el más interesante, pues modula de forma automática, usando la IA del equipo, la tasa de refresco, según la tarea que esté realizando el usuario. No es tan precisa (va saltando entre 60Hz, 90 Hz, 120Hz… según sea conveniente) como los paneles LTPO de los equipos más avanzados del mercado, pero cuestan más del doble.

El panel pOLED del Edge 30 Fusion incluye dos modos de color, así como una tasa de refresco de 144Hz fácilmente modificable en los ajustes

El panel pOLED del Edge 30 Fusion incluye dos modos de color. El primero de ellos es “Saturado”, que mejora la saturación del color para ofrecer una mejor intensidad de imagen. No es excesivamente forzado hasta el punto de encontrar colores exagerados, como ocurría en antiguas versiones de las pantallas con esta tecnología. Los usuarios también pueden optar por el modo de color “Natural”, que busca más realismo en la representación de los colores, e intenta optimizar el color según el contenido que se muestra en pantalla. Funcional realmente bien, pero resulta en imágenes más apagadas. Es cuestión de gustos. También incluye un sencillo ajuste para la temperatura de color del panel, para modificar entre un tono más frio o más cálido.

Rendimiento

El Motorola Edge 30 Fusion cuesta con un procesador Snapdragon 888+, que si resulta familiar para los lectores se debe a que era el más habitual en los equipos de gama alta de la pasada generación. Es por ello que, pese a no contar con el chip más puntero del momento (ese sería el Snapdragon 8 Gen 1+), el uso de este procesador, de sobra conocido y probado, debería resultar en un buen rendimiento. Y ese es el caso en la gran mayoría de ocasiones.

En cuanto a mover el sistema, lo realiza con máxima fluidez y sin apenas aparición de retardo en ningún momento. Si que es cierto que en algunas ocasiones la animación de pulsar la huella dactilar se ha bloqueado momentáneamente, sumándole un par de segundos al desbloqueo del equipo. Esto ha sucedido únicamente en un par de ocasiones, por lo que no es algo realmente preocupante tras miles de desbloqueos sin ninguna clase de problema.

El Edge 30 Fusion será también un gran aliado para los aficionados a jugar con el teléfono móvil. Gracias a su gráfica avanzada Adreno 660 y el potente procesador de 8 núcleos, hasta los juegos más demandantes funcionan con un gran rendimiento y sin parones. Únicamente en el popular juego de supervivencia de Epic, Fortnite, se han experimentado ligeras caídas ocasionales en el framerate, pero únicamente en el modo de rendimiento gráfico al máximo.

Cámara

La cámara es sin lugar a dudas una de las asignaturas pendientes de Motorola. Con cada móvil que sacan al mercado van corrigiendo poco a poco este defecto, pero aún están lejos de los grandes jugadores en este departamento como pueden ser Apple, Google o Samsung.

En esta ocasión Motorola propone un sistema de triple cámara en la que dos sensores destacan claramente, siendo el tercero simplemente un medidor de profundidad para mejorar la profundidad de campo y con ello, el modo retrato.

El Edge 30 Fusion cuenta con una cámara principl de 50MP y un ultra gran angular de 13MP

El sensor principal cuenta con 50 megapíxeles, pese a que captura por defecto a 12,5mpx, así como estabilización óptica de imagen. Su apertura es de f/1.8, por lo que dejará pasar una buena cantidad de luz. Las fotografías que se obtienen de esta lente -en condiciones lumínicas adecuadas- son, sinceramente, muy buenas. Cuentan con contraste, pero sin extremos (ni sobrexpuestas ni lo contrario) y gran cantidad de detalle natural. Esto último significa que no están sobreprocesadas, de forma que las texturas no lucen reales. Por último, la representación del color es muy correcta, manteniendo una gran similitud a como estos se muestran en realidad.

Por otro lado, los resultados de la segunda lente no se quedan atrás. También poseen un buen nivel de detalle y, pese a que el rango dinámico es peor que en la principal, el nivel de contraste se sigue manteniendo en una calidad aceptable, especialmente para un post en redes sociales. Se trata de un sensor gran angular de 13 megapíxeles con una apertura de f/2.2 y un ángulo focal de 120 grados. Este sensor hace las veces de lente macro con resultados sorprendentemente buenos para no tratarse de una lente dedicada. En caso de necesitar una foto muy próxima a un objeto el Edge 30 Fusion resultará ciertamente útil.

Por último, la fotografía nocturna. Habitualmente es la tarea pendiente de la mayoría de terminales de gama media. En este caso concreto, el Edge 30 Fusion sale mejor parado que el resto. Gracias a su modo noche, cuyo procesamiento trabaja realmente bien para evitar el exceso de ruido, mantiene gran cantidad de detalle sin suavizar en exceso las texturas, por lo que el efecto acuarela no está tan presente. Quizás se produzca una ligera tendencia a un tono tirando a anaranjado, pero se puede modificar fácilmente con el editor incluido en el móvil si se prefiere una tonalidad más fría.

¿Me lo compro?

Con el Edge 30 Fusion Motorola ha hecho un excelente trabajo en la gama media-alta. Por 599 euros (es fácil encontrar algún descuento) uno se lleva un equipo con un diseño elegante, buenos materiales, construcción robusta y una gran pantalla. El rendimiento está asegurado gracias a su procesador, e incluso han mejorado notablemente en su talón de Aquiles. Por supuesto no es un dispositivo perfecto, pues eso es prácticamente imposible. Por ejemplo, la batería no es la mejor del mercado, requiriendo ser cargada a mitad del día con un uso intensivo. Por suerte si incluye el cargador en la caja, de 68W nada más y nada menos.

Nota: 8,5

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