El operador rumano Digi, la teleco que más está creciendo desde hace un año y que ya supera los 6,1 millones de clientes, ha acordado por los otros dos operadores un preacuerdo que le permitiría hacerse con los remedies que se fijen, aunque no se trata de una decisión definitiva y las empresas podrían decidir no seguir adelante con el acuerdo sin ningún tipo de contrapartida, según avanza Bloomberg.
La fusión creará un gigante de 18.700 millones de euros y convertirá a la empresa combinada en el primer operador de España en términos de clientes, pero ha levantado cierta sospecha en el regulador europeo sobre su impacto en el mercado minorista, aunque asegura que no hay problema en el mercado mayorista, según el informe preliminar compartido hace ya cinco meses.
Esto ha llevado a Orange y MásMóvil a prepararse para la imposición de una serie de remedies que varias fuentes apuntan a que serán componentes de la red, una de las marcas con un grupo de clientes y una parte de su espectro, lo que reduciría su dominio en ese apartado, aunque el operador que lidera Meinrad Spenger ya avanzó esta situación al deshacerse del 51% de la red de Eusktalel a un consorcio de inversores.
Sin embargo, Digi no está solo en la negociación por hacerse con los remedies de la fusión, ya que tanto Avatel como Adamo y Finetwork buscaban hacerse con los remedios.
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