La mejor cámara de Samsung
En el caso del móvil que hemos probado durante las últimas semanas, Especificaciones, el concepto de imagen se puede aplicar en dos sentidos: en el estético, el que se refiere al diseño -que es muy acertado- y en el de la cámara, cuya bondad, desde nuestro punto de vista, choca ligeramente con el diseño al sobresalir en exceso. Eso sí, su calidad justifica el sacrificio de ese detalle. En conjunto, se trata de una cámara conformada por cuatro objetivos (108.0 Mpx + 12.0 Mpx + 48.0 Mpx + VGA) con apertura múltiple, autoenfoque, sensor ToF (sensor de profundidad por tiempo de vuelo), estabilizador de imagen, un zoom óptico 10x y digital hasta 100x; además, graba video en 8K. La cámara frontal, por su parte es de 40 Mpx, con una apertura focal F2.2, opciones y efectos varios.
Por supuesto, todo el sistema va acompañado de un completo software que facilita mucho el manejo y que, con un solo toque, permite, entre otras cosas cambiar los objetivos. Además, lleva sistema de captura única, el de foto convencional, modo profesional, cámara lenta, superlenta, rápida, panorámica, enfoque dinámico (bokeh), filtros, modo belleza para los retratos, foto animada y otros como el selfie panorámico inteligente (la cámara cambia automáticamente cuando ve a más de dos personas en el encuadre).
Todo el sistema va acompañado de un completo software que facilita mucho el manejo y que, con un solo toque, permite, entre otras cosas cambiar los objetivos
El smartphone cuenta con HDR automático, con lo cual captamos más detalles de las zonas luminosas y oscuras y las fotos salen mejor en condiciones de baja luminosidad. Así mismo, dispone de inteligencia artificial aplicada a la imagen, a través de Bixby y mediante el optimizador de escenas; de forma que cuando reconoce un tipo de imagen, prepara los parámetros de la cámara para que la toma sea perfecta. Otra posibilidad es utilizar las sugerencias de composición que nos ofrece el equipo, según el entorno o el objeto que estemos enfocado; el resultado suele ser bastante bueno.
Y si bien es verdad que Samsung ha tenido que pelear mucho en términos de cámara por la fuerte competencia de Huawei y Apple en este campo, también lo es que los resultados obtenidos se pueden comprobar en cualquiera de las tomas que mostramos
Y si bien es verdad que Samsung ha tenido que pelear mucho en términos de cámara por la fuerte competencia de Huawei y Apple en este campo, también lo es que los resultados obtenidos se pueden comprobar en cualquiera de las tomas que mostramos y que hablan por sí mismas; de hecho, todos los especialistas en fotografía la consideran la mejor cámara implementada en un móvil de la marca.
Otra comparativa posible cabe con los equipos de los móviles de la propia serie S20 de Samsung, con una ventaja indiscutible al contar con cuatro cámaras, sensor TOF, objetivos con mayor resolución y un ‘tele’ con mayor distancia focal, para el cual, el fabricante coreano ha buscado inspiración en la lente periscópica de los móviles de Huawei. Los aficionados a la fotografía pueden acudir a la página especializada Dxomark, donde este teléfono se sitúa en sexto lugar del mercado mundial por calidad de cámara.
Como detalles a reseñar en esta prueba, el hecho de que graba en 8K, que los videos de exteriores ofrecen muy buenos resultados, pero nos desilusionó ligeramente en fotos nocturnas con objetos iluminados y luna llena.
Hablemos de 5G
En un plano más técnico, tenemos que hablar de la implementación del S20 Ultra y de todo lo que aporta para que funcione con agilidad y fluidez un sistema operativo -Android 10- al que se suma la versión One 2.1 UI de la capa de personalización de la marca. Y, además, en términos de conectividad y telefonía no podemos olvidar que hablamos de un móvil 5G, preparado para su comercialización en Europa en las denominadas frecuencias Sub6, un detalle que en España tiene su importancia porque el único operador que ofrece en este momento telefonía móvil 5G comercial es Vodafone con sus frecuencias del entorno de los 3.5 Mhz.
Como SoC (sistema de chips) dispone el Exynos 990 de 7 nm, salvo para Estados Unidos donde recurre, como es habitual, a Qualcomm y elige su placa más avanzada: Snapdragon 865 de 7 nm+. Los dos procesadores son octacore, en el primer caso con una arquitectura Mongoose M5 y en el segundo, Kryo 585. En ambos casos hablamos de altísimas velocidades de reloj que aportan una respuesta ágil y tan fluida que se puede tachar de instantánea.
Como es habitual en estos niveles de producto, el procesador gráfico es muy exigente, de forma que, entre otras cosas, hace las delicias de los jugadores. Para comprobarlo recurrimos a la prueba de rendimiento 3DMark, Sling Shot Extreme, un test diseñado para probar resultados de los teléfonos de la gama más alta del mercado con tarjetas gráficas potentes. El resultado obtenido fue de 6718 puntos, lo que significa que es prácticamente el mejor obtenido entre todas las pruebas realizadas por este ‘benchmark’. Y lo que es mejor, soportó el test sin calentarse, algo que merece la pena destacar dentro de la marca coreana.
Siguiendo con la conectividad y más allá de la señalada quinta generación (5G), hay que hablar de WiFi 6 (última versión de conexión inalámbrica en media distancia); Bluetooth 5.0, conexión satelital universal y NFC para realizar pagos (entre otras cosas). Todo el sistema va apoyado en una memoria interna de 128 GB de ROM con 12 GB de RAM (aunque hay otras composiciones con 256 y 512 GB de ROM, 12 y 16 GB de RAM respectivamente).
Y dónde se refleja todo esto
Y si bien, todas las características del S20 Ultra son ‘tope de gama’, no podemos obviar dos elementos básicos de un teléfono móvil del 2020: la pantalla y el sonido.
En el primer caso, nos encontramos con un display Dynamic AMOLED 2X multitáctil capacitiva, de 6.9 pulgadas de diagonal, dispuesta en un cuerpo de 16,69 x 7,6 x 0.88 cm, cubierto por cristal de la marca Corning, y dentro de esta su cristal más resistente, el Gorilla Glass 6. La resolución del panel es de 1440x3200 px, con una densidad de píxeles de 511 ppp y una relación de aspecto 20:9. Su calidad se aprecia a simple vista y viene reforzada tanto por HDR10+ en el ámbito de la imagen, como de un nivel de estanqueidad IP68, protección máxima contra el polvo y el agua.
El sonido, flojea. El micrófono del sistema manos libres es tremendamente básico y los altavoces estéreo nada del otro mundo, lo que en un momento en que las videoconferencias y las llamadas manos libres se imponen, resulta, o bien una remora o bien una invitación a utilizar los cascos AGK que acompañan al equipo, o mejor aún, los ‘chulísimos’ Galaxy Buds+, con diseño intraural de buena sujeción que se alejan de la tendencia ‘pendiente’.
¿Y el precio? Para muchos será lo feo: con 128 GB de ROM y 12 de RAM, 1.400 euros en la página oficial.